Las organizaciones sociales se instalaron en un plantón como forma de protesta en contra de la iniciativa de dejar sin efecto la ley contra la minería en el país.
Foto EDH/ Menly González
Manifestantes llegaron desde distintos puntos del país.
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Las organizaciones que defienden el medio ambiente, el derecho al agua y la soberanía alimentaria afirman que la minería es un proyecto "de muerte" que no trae beneficios a los salvadoreños.
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La Ley que penaliza en su totalidad los proyectos mineros fue aprobada en 2017, mientras al menos 36 proyectos mineros tenían trámites de permiso para ejecutar proyectos en el país. Ninguno fue permitido.
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Los activistas advierten que El Salvador tendría complicaciones en abastecimiento de alimentos, agua, las enfermedades como cáncer e insuficiencia renal serían parte de las afectaciones si los proyectos mineros se ejecutan.
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La minería provocaría la migración obligada de varias comunidades en departamentos como la Unión, Chalatenango, Cabañas y Usulutan.
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Jóvenes que asistieron a la manifestación afirmaron no estar a favor de la minería, "la deforestación ya es suficiente problema en el medio ambiente como para introducir la minería".
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Más de 200 personas se concentraron en la entrada de la Asamblea Legislativa para entregar una correspondencia a los diputados sobre el tema.
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Silverio, lider indígena de las comunidades de Izalco afirmó que la minería en todas sus formas arranca la fertilidad de las tierras para los cultivos, lo que encrudecería la problemática alimentaria en las comunidades más pobres.
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Los manifestantes pidieron a los diputados ejecutar una discusión con conciencia para la derogación de la ley.
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Ambientalistas: "La minería es un proyecto de muerte"
Salvadoreños se unieron en un plantón en las afueras de la Asamblea Legislativa para protestar en contra de la posible derogación de la Ley contra la Minería.