En el desayuno, en el almuerzo o en la cena, todo buen salvadoreño sabe que esa tortilla rellena acompañada de curtido y salsa de tomate es todo un manjar en cualquier hora del día, ya que con solo escuchar el sonido del quesillo derritiéndose en la plancha se convierte en un plato irresistible.
Las pupusas originalmente son hechas de masa de maíz, sin embargo, para el gusto de otros comensales, también pueden ser de harina de arroz, las cuales, atribuyen su origen en Olocuilta, conocida como la “Ciudad de las pupusas de arroz”, ya que también en este municipio encontrarás varias pupuserías, dando lugar a los famosos pupusódromos.
Pero el mayor gusto de las pupusas, no está solo en la masa, sino también en el o los ingredientes que funcionan como relleno; en efecto, este plato típico existe en variedad de sabores, puesto que los salvadoreños hacen evidente su gusto e ingenio en la cocina nacional y las preparan en sus versiones tradicionales, pero también en sabores más exóticos.
Por tradición, los salvadoreños han probado las pupusas de frijoles molidos, las de queso, las de chicharrón (la extracción de la carne de cerdo) y las famosas revueltas, que son las de chicharrón, con frijoles y queso.
Pero, hay otros ingredientes que han llevado a los salvadoreños a comer pupusas en un nivel más exótico, aunque para algunos las tradiciones continúan siendo su mejor opción.
Entre los sabores que han ampliado el recetario de esta deliciosa comida típica está la de pescado, atún, pulpo y camarones, las cuales se vuelven una tentación para los amantes de los frutos del mar.
Sin embargo, la exquisitez de una pupusa también puede estar en utilizar ingredientes menos exóticos, pero siempre con un factor diferente y peculiar como las de ayote, loco, cochinito y hierbas comestibles como chipilín, mora, espinaca y papelillo.
A estas se suman otras de las que muy probablemente las ha probado, o al menos has escuchado hablar de esta variedad, como las deliciosas pupusas de pollo y las peculiares de sabor intenso como las de ajo con quesillo o las de chile jalapeño con quesillo.
Pero además de todas estas existe una que recoge una variedad de ingredientes en un solo mordisco, se trata de la pupusa loca, una de las tradiciones más recientes de la gastronomía salvadoreña que en su receta original lleva más de 20 ingredientes.
Sabores que retan
En los diferentes municipios de El Salvador se celebran festivales gastronómicos, donde un alimento salvadoreño es el protagonista, sin embargo estos sabores no se pueden dejar pasar para probarlos en las famosas pupusas.
De ahí surgen nuevos sabores de este plato típico que se vuelven todo un reto para saber si te atreves a probarlas, tal es el caso de la pupusa de jocote, esta variedad surgió en el festival del dicho producto en San Lorenzo, Ahuachapán.
Al trasladarte al oriente del país, específicamente en Yucuaiquín, La Unión, una nueva variedad de pupusas con un toque de sabor peculiar surge en el Festival de la Anona, la pupusa rellena de esta fruta que muchos disfrutan en su temporada.
Pero regresando al occidente del país, en Santa Ana, un nuevo aroma y sabor en el plato típico salvadoreño despierta la curiosidad de nacionales y extranjeros, al escuchar sobre el nuevo invento de la pupusa de carne de res asada, la cual abre nuevas posibilidad de satisfacer a los paladares.
La zona central de El Salvador, tampoco se queda atrás en las exóticas creaciones de las pupusas, ya que en el barrio San Jacinto, en San Salvador, un emprendimiento gastronómico creó las pupusas de aguacate, piña y costilla de cerdo, la que sin duda pone a prueba sabores impensables en el plato típico salvadoreño.
Ahora que ya conoces algunas de las variedades menos tradicionales de las pupusas, ¿cuál te atreverías a probar o intentar hacer en casa?