La inteligencia artificial (IA en inglés) ha ingresado a muchas de las industrias que actualmente manejan los avances tecnológicos en diversos ámbitos, desde manejo de redes sociales a conducción automática de vehículos.
Es esta creciente industria de las IAs que ha movido a que Estados Unidos proponga ciertos derechos que los usuarios deberían tener al momento de utilizarlas. De esta forma presentaron una “Declaración de derechos de IA”.
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La propuesta presentada por la Casa Blanca no es una ley que las empresas deban seguir para la creación de sus servicios con inteligencia artificial, sino una sugerencia sobre un marco legal que empresas y gobiernos puedan seguir para implementar la tecnología.
Según la Casa Blanca, los sistemas que han utilizado inteligencia artificial “han demostrado ser inseguros, ineficaces o parciales”. Por lo que la creación de las propuestas de derechos hacia los usuarios era algo importante para implementar.
Las cinco propuestas para la regulación:
- Sistemas seguros y efectivos: lo que se traduce en que deben trabajar en que los sistemas no sean vulnerables ante ataques o riesgos de seguridad.
- Protecciones contra la discriminación algorítmica: que busca que no hay discriminación por razón de raza, etnia, sexo, entre otros.
- Privacidad de datos: protección de los datos personales de las personas.
- Aviso y explicación: que si una tecnología utiliza una inteligencia artificial notifique al usuario su implementación.
- Consideración humana oportuna: que los usuarios puedan decidir si quieren hacer uso de inteligencia artificial o de humanos.
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La Cámara de Comercio de Estados Unidos mencionó que si estas recomendaciones se vuelven leyes podrían “poner trabas a la capacidad de Estados Unidos para competir en el escenario global”.
Las empresas que desarrollan robots también han hablado sobre el mismo tema en otras ocasiones, mencionando que sus productos no se convertirán en armas como temen varios.