El futuro de TikTok en Estados Unidos pende de un hilo. La plataforma, utilizada por cerca de la mitad de los estadounidenses, podría ser prohibida a partir del 19 de enero si la Corte Suprema no bloquea la entrada en vigor de una ley que busca forzar la venta de la aplicación por parte de ByteDance, su empresa matriz con sede en China.
Puedes leer: ONU se manifiesta ante suspensión de programa de verificación de Meta
La administración de Joe Biden defiende la ley, alegando que el control de TikTok por una compañía china representa un riesgo significativo para la seguridad nacional. Según el gobierno, China podría utilizar la plataforma para obtener información sensible de los usuarios o influir en la difusión de contenidos. Sin embargo, TikTok argumenta que no hay pruebas de tales acciones y que los temores están basados en riesgos hipotéticos.
Por otro lado, TikTok y los creadores de contenido que dependen de la aplicación aseguran que esta medida viola la Primera Enmienda, que protege la libertad de expresión. "Esta es una amenaza directa a millones de usuarios y sus medios de vida", señalaron los abogados de los afectados.
Te puede interesar: Vulnerabilidades y ataques cibernéticos más destacados del 2024
El presidente Donald Trump, en un giro inesperado, pidió a la Corte que posponga la prohibición para buscar una "resolución política". Trump, que anteriormente apoyaba la medida, ahora asegura que su experiencia podría ser clave para salvar la plataforma mientras se atienden las preocupaciones de seguridad.
De implementarse la ley, TikTok estima perder hasta un tercio de sus usuarios diarios y una porción significativa de sus ingresos en Estados Unidos en tan solo un mes. Mientras tanto, creadores y usuarios contemplan mudarse a otras plataformas ante la incertidumbre.
Lee también: Descubre las últimas funciones de WhatsApp en 2025
La Corte Suprema, que dedicará dos horas a los argumentos legales, tendrá que decidir si aplica un escrutinio estricto para evaluar la constitucionalidad de la ley, un estándar que pocas leyes logran superar.
La decisión podría ser anunciada en cuestión de días y marcar un precedente histórico en el debate sobre redes sociales, libertad de expresión y soberanía tecnológica.