El calor migueleño se sintió la noche del sábado en su gente, durante el gran carnaval de San Miguel edición 63. Desde tempranas horas de la tarde, los migueleños y miles de visitantes se acercaron a la avenida Roosevelt sur, así como a las principales calles del centro de la ciudad para reír y para gozar porque no hay mejor lugar para gozar que San Miguel en carnaval, tal como lo cantaba a viva voz el compositor Paquito Palaviccini.
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Este año ha sido nombrado como gran mariscal del carnaval de San Miguel el comunicador, José Antonio Alvarenga, mejor conocido como “Tony” Alvarenga, quien radica en Los Estados Unidos.
No faltó la música, el color y la creatividad en las más de 70 carrozas que recorrieron las calles principales de la ciudad. El colorido desfile partió de la 7a avenida Sur recorriendo varios kilómetros hasta el palacio municipal.
Para Adelio Castro, encargado de diseñar la carroza del Barrio San Francisco, “las carrozas son una tradición y se debe den de mantener, cambian las temáticas, se están usando carrozas con mucho color, flores, pero quien tiene que resaltar es la reina o las personas que van arriba de la carroza”, comentó.
El desfile cerró con la carroza que transportaba a la reina del carnaval, Nayadeth Niseth Hernández Perla, de 20 años, representante de la colonia Ciudad Toledo, electa entre 16 señoritas representantes de barrios y colonias y quienes también se lucieron y saludaron a los asistentes desde sus coloridas carrozas.
La carroza en la que se lucieron el rey y la reina de los adultos mayores se robó la mirada de las personas al ver la energía y alegría de los reyes que no paraban de bailar.
No faltaron los tan buscados regalos por parte de las empresas participantes, así como los chichimecos, personajes mitológicos, bufones y bailarines que animaron a los presentes e incluso aprovecharon para poder tomarse algunas fotografías con ellos.
"Para mi es agradable es primera vez que lo veo, soy ciudadano mexicano y es primera vez que lo veo. Venimos de recorrido México - Costa Rica pasamos por El Salvador y nos encontramos con este evento, pero creo que le falta más difusión internacional porque no sabíamos de este evento", manifestó Miguel Ángel González Larios, de Colima, México.
Cómo él, muchos turistas extranjeros se han sumado a la gran celebración del oriente salvadoreño, pese a la amenaza latente del Chaparrastique en actividad.