La maldiva Mariyam Shaina Naseem, de 21 años, voló a México para convertirse en la primera modelo maldiva en participar en el concurso Miss Universo, desatando vergüenza entre eruditos, conservadores, y el Gobierno de esta nación insular que vive bajo una rígida aplicación de la ley islámica.
El Gobierno de Maldivas ha condenado a la modelo que participa en el concurso Miss Universo, calificándola de no islámica, mientras que muchos jeques, eruditos y líderes religiosos etiquetan la participación de la concursante como un pecado.
En un comunicado emitido el 30 de octubre, el Ministerio de Empoderamiento Juvenil de este país de mayoría musulmana condenó el concurso como un acto que socava la religión, las creencias y la cultura del pueblo maldivo.
"El Gobierno maldivo no acepta ni apoya ningún concurso que menoscabe la religión, las creencias y la cultura del pueblo maldivo, y no acepta que ningún maldivo participe en dichos concursos", recita el comunicado.
Debido a estas razones, "condenamos a cualquier maldivo que participe en tal concurso y pedimos al participante que se retire inmediatamente", exigió.
Eruditos religiosos se apresuraron a oponerse a Shaina, mientras que algunos llegaron a decir que merecía estar en el infierno por participar en el concurso.
"Miss Universo debería llamarse 'Miss Infierno', ya que las mujeres participan desnudas en el concurso. Las mujeres que participan en el concurso son personas malvadas y corruptas que promueven la desnudez en todo el mundo por dinero", publicó en su cuenta en Facebook el jeque Zamzam Farish, exprofesor de la escuela árabe Arabiyya.
El religioso Abdulla Bin Janab, presidente de la ONG religiosa Jamiyath Salaf, también usó las redes sociales para su condena, en la que remarcó que revelar la belleza de las mujeres frente a un hombre es un pecado, y llamó a los organizadores de tales concursos a temer a Dios.
Entre la lluvia de reacciones surgió también la del reconocido Ali Rameez, un excantante convertido en erudito, que calificó la participación en el concurso Miss Universo como "lujuriosa y repugnante" en un programa de televisión que presenta.
"Una empresa privada ha allanado el camino para que una maldiva participe en el concurso Miss Universo. Eso es repugnante y lascivo", dijo Rameez en el canal de televisión Dhaaris, basado en la religión.
El otro estándar
Sin embargo para algunos maldivos la decisión del Gobierno de condenar a Shaina como un movimiento degradante para las mujeres es excesiva y alimenta el doble estándar del país asiático, mejor conocido como destino de lujo y paradisíacas islas.
"Toda nuestra economía se basa en la venta de drogas, alcohol y carne de cerdo. Las celebraciones giran en torno a la música y el baile. La mayoría está involucrada en la usura y los sobornos, pero una mujer involucrada en algún concurso es donde se traza la línea. Es hilarante lo que elegimos", dijo un usuario en X.
Muchos señalaron que países islámicos como Arabia Saudita y Pakistán también tienen modelos que participan en el concurso.
"¿Por qué no dejamos que esta joven siga sus sueños? Arabia Saudita está compitiendo este año. Mujeres musulmanas de Bahréin, Líbano, Egipto, Malasia y Pakistán, entre otras, han competido antes. También se les permiten hacer ajustes por motivos religiosos y culturales", dijo Hussain Amru, excandidato vicepresidencial en las elecciones de 2023.
Algunos dijeron que condenar a Miss Universo mientras se organizan concursos como "Míster Maldivas" para hombres expone la hipocresía de los gobiernos.
"¿Míster Maldivas y las competencias internacionales de fisicoculturismo donde los hombres solo usan bóxers está bien, pero Miss Universo no?", preguntó la usuaria Aminath Shathufa, también en X.
Desde que llegó al poder, el Gobierno del presidente Mohamed Muizzu ha mantenido una estrecha relación con figuras religiosas y ONG, incluida Jamiyath Salaf. En septiembre pasado, la ONG recibió una subvención para ayudar a ejecutar sus programas.
Para las elecciones, más de 100 jeques emitieron un comunicado firmado pidiendo a la gente que votara por Muizzu.
Shaina no ha hecho comentarios públicos al respecto. EFE trató de contactar a la participante y a su agencia, sin respuesta.
En una entrevista al medio maldivo He and She, la participante aseguró que lo que respecta a los comentarios, ella tiende a "ignorar los que tienen un objetivo degradante".