La alfombra roja de los premios Emmy se transformó en una verdadera pasarela. Un presagio fashionista luego por la huelga de guionistas y actores que paralizó la industria del entretenimiento. De ahí que las estrellas estén en el mood de lucir sus mejores galas.
A diferencia de las pasadas alfombras rojas, esta vez imperó el estilo propio y no un estilo expuesto en los desfiles de alta costura. El único factor común en los looks fue el desbocado glamour en piezas confeccionadas a la medida.
Este año, en la ceremonia número 75 de los Emmy, desfilaron figuras como Kieran Culkin, Brian Cox, Elisabeth Moss, Bella Ramsey, Bill Hader, Jason Sudeikis, Jeremy Allen White, Rachel Brosnahan o Quinta Brunson, entre muchos otros.
La paleta de colores fue muy diversa y ni hablar de las texturas, detalles y acabados de cada atuendo. En el caso de los caballeros, el color negro fue el favorito. Los trajes se volvieron audaces por la fusión de telas mates y brillantes e incluso por el uso del cuero. La mayoría de actores optó por llevar corbatín un detalle que refrescaba el look pero manteniendo la nota sofisticada.
En el caso de las actrices el estilo florar y el de los osados estampados irrumpió con fuerza en la alfombra roja. Sin embargo hubo algunas que sucumbieron al clásico color negro. No obstante apostaron a cortes vanguardistas e inesperados.
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Detalles como las plumas, tuvo un resurgir, aunque no faltaron los brillos representados en exuberantes pedrerías. Las transparencias y los escotes estuvieron a la orden del día. Tal como fue el caso de Selena Gómez, quien impactó con un look dramáticos. Otro destacado outfit fue el usado por Katherine Heigl, con un imponente vestido en un brillante color rojo, el cual resaltaba a al perfección los diamantes que portaba.
Cabe destacar que el gran acierto del look de los Emmy fueron, en el caso de los hombres el efecto del cabello “relamido” y en las damas el efecto de las ondas sueltas.