La reina Letizia de España y el príncipe Carlos han protagonizado un “escándalo real” luego de que salieran a la luz unas imágenes en donde se les ve actuando de forma inadecuada para los miembros de la realeza en un evento público. Al menos eso es lo que opinan los followers.
La pareja visitó la Galería Española, ubicada junto al castillo de Auckland, en el noreste de Inglaterra, que alberga la mayor colección de pintura española de los siglos XVI y XVII fuera de Londres. Pero fue su saludo previo el que acaparó toda la atención mediática.
Las fotografías muestran a un Carlos extremadamente alegre y bastante cariñoso con Letizia, quien también sonreía plenamente. Ambos se encontraban muy cercanos por lo que recibieron duras críticas y fuertes cuestionamientos.
“Que beso de mano más extraño. En Europa el hombre no besa la mano, sólo se acerca a ella”, “Qué hace el príncipe de Gales sobando a nuestra reina”, “¡Anda, que el besuqueo de tío! En la cara, la mano y no tienen cuidado con el Covid”, y “Estas fotos están raras, primera vez que veo tanta cercanía y confianza entre gente de la realeza, que siempre usan protocolo y son distantes. El Carlitos más bien se ve coqueto”, señalaron los seguidores.
Letizia fue la más afectada en este encuentro. y a ella le llueve sobre mojado pues también la critican por abusar de los retoques estéticos.
“¿Cuántos años tiene la doña? Parece contemporánea del príncipe”, “Mucha cana y mucho botox, tanto que no puede ni gesticular”, “Lo único natural es el pelo”, y “No entiendo tanto retoque cuando ahora va y decide dejarse las canas. En esas fotos parece muy mayor la verdad, no la veo favorecida”, fueron algunos de los desfavorecedores comentarios que recibió.
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Cuadros de Zurbarán
Dentro del castillo, Letizia y el heredero de la Corona británica observaron el cuadro "San Marcos", del pintor José María Cano, para después acceder al comedor donde cuelgan varios cuadros de Francisco de Zurbarán (1598-1664), correspondientes a la serie Jacobo y las doce tribus de Israel, pintados en la década de 1640.
El director de la National Gallery, Gabriele Finaldi, fue el encargado de explicar a la reina y al príncipe de Gales detalles de estas obras, de grandes dimensiones y que cuelgan en las paredes del comedor, donde hay una mesa con candelabros y servicio de mesa.
Con su presencia en Bishop Auckland, la reina quiere dar a conocer los proyectos culturales españoles en todo el mundo, como ocurrió en 2019 cuando inauguró, también acompañada por el príncipe de Gales, la muestra "Sorolla: Spanish Master of Light" en la National Gallery de la capital británica.
El castillo, piedra angular del proyecto
Este castillo es la piedra angular del llamado "proyecto Auckland", integrado por puntos de interés histórico y cultural en Bishop Auckland, entre los que figura la Galería Española.
Este proyecto ha sido una iniciativa privada de Jonathan Ruffer, abogado y filántropo, que busca incentivar la recuperación de esta región que sufrió un importante declive económico y social por el cierre de las minas de carbón en los años 80.
Ruffer, que llevaba meses trabajando en esta visita, no pudo estar hoy presente tras contagiarse de covid-19.
En 2012, Ruffer adquirió la propiedad del castillo, que incluyó la serie de Zurbarán (1598-1664), aunque uno de los cuadros, el retrato de "Benjamín", es el único de la serie de los doce hijos de Jacob que no está en Auckland ya que es propiedad privada, por lo que ha sido prestado para exponerse en la Galería Española por el Grimsthorpe & Drummond Castle Trust, en el condado de Durham.
La Galería Española, dividida en varias salas, abre con la obra "Benjamín", desde donde Letizia y Carlos iniciaron el recorrido del museo, que alberga unas 120 obras, entre ellas de Diego Velázquez (1599-1660) y Bartolomé Esteban Murillo (1617-1682).
En la mayor de las salas, la reina y el príncipe saludaron a las autoridades locales antes de desvelar una placa que da cuenta de esta visita oficial y firmar el libro de ilustres visitantes.
Tras visitar el museo, que fue abierto al público el pasado octubre, la reina Letizia y el príncipe Carlos fueron despedidos por una multitud de ruidosos escolares de esta localidad, que portaban y agitaban banderas españolas y británicas.
Después de despedir con dos besos a la reina, el príncipe de Gales continuó saludando a los lugareños de Bishop Auckland, una localidad que confía en tener pronto también un bar de tapas.
Carlos califica la galería de "muy especial"
Antes de subirse al coche oficial, en medio del griterío de los escolares y los lugareños, el heredero de la Corona británica dijo a Efe que la Galería Española es un lugar "muy especial".
La presencia de la realeza ha sido recibida con entusiasmo por las autoridades locales.
Mientras esperaban a que Letizia y Carlos desvelaran la placa oficial, el presidente del Ayuntamiento de Durham, Watts Selling, dijo a Efe que esta visita es "muy importante" por tratarse de unas obras "de arte de nivel mundial".
Asimismo, John Hewitt, miembro del Ayuntamiento de Durham, contó a Efe que confía en que la presencia de la reina en el museo y el impulso que la localidad da al arte español ayuden a que el condado de Durham pueda ser elegido en mayo "Ciudad de la Cultura" para el año 2025.
En este museo también hay obras de José de Ribera (1591-1652), con su cuadro "San Francisco"; Bautista Maíno (1581-1649), con "San Antonio de Padua", o la "Madre Dolorosa" de Jerónimo Espinosa (1600-1667).
La colección de Ruffer se complementa con otros préstamos, incluidas obras del Museo y Biblioteca de la Hispanic Society de Nueva York que nunca antes se habían mostrado en el Reino Unido.
Al recorrer las salas, el visitante camina sobre un dibujo del río Guadalquivir, en Sevilla, y se pueden ver obras de Velázquez, como el "Cardenal Pamphili", cedido por el Museo de la Sociedad Hispánica de Nueva York, o "Felipe IV caza de jabalí", del mismo artista y prestado por la National Gallery de Londres.