Con un ramo de rosas blancas Meghan Markle, la esposa del príncipe Enrique, viajó este jueves a la ciudad de Uvalde, en Texas, para dejar una muestra de respeto y solidaridad con las familias de las 21 víctimas del tiroteo.
Usando un atuendo relajado y sencillo Markle llegó con unos jeans, camiseta y como en muy pocas ocasiones usando una gorra, la duquesa de Sussex, que actualmente vive en Estados Unidos, rindió un tributo en el improvisado monumento junto al juzgado en Uvalde.
Su visita era completamente inesperada, Markle dio un recorrido por el lugar mientras observó las cruces blancas en las que han sido escritos los nombres de las víctimas del tiroteo del martes.
La pequeña ciudad de Uvalde, donde se encuentra ubicada la Escuela Primaria Robb esta a 100 km aproximadamente de la frontera con México.
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La duquesa de Sussex y exactriz ha sido la figura más notable que llegó hasta el lugar para rendir un tributo y sumarse al duelo de las familias.
En una cruz dispuesta para honrar la vida de Uziyah García, una niña de ocho años y la víctima más joven perdió la vida en el tiroteo en el interior de un salón de clases a solo un par de días de salir de vacaciones de verano.
Se espera que otras figuras políticas se hagan presentes a la escena entre ellos el presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
Meghan Markle se abstuvo de hacer declaraciones publicas y se limitó a quedarse en silencio frente al monumento.
Comunidad de Uvalde rinde homenaje
Decenas de personas en su mayoría residentes de la zona han llegado a las instalaciones de la escuela para llevar ofrendas y rendir sus respetos a las 21 víctimas en su mayoría eran niños con ascendencia latina que perdieron la vida en el ataque.