En su momento fue la noticia que conmocionó a los televidentes hispanos. Su salida de la cadena Telemundo era impensable sobre todo el éxito que tenía el programa Al rojo vivo. Sin embargo fue una realidad, María Celeste Arrarás fue destituida, aunque ella asegura que no se lo tomó personal.
Incluso cuando se especuló que su salida se debía, principalmente, al estrambótico sueldo que se agenciaba mes a mes. Al menos así lo dio a entender durante una entrevista con la venezolana Erika de la Vega.
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"Las cosas de la vida no te las puedes tomar personales porque cuando te las tomas personales empiezas a actuar en base al ego y a reaccionar en base al ego, que es muy mal consejero, y ahí yo lo mire de una forma que no empecé a decir 'la víctima yo, después de tantos años, mi servicio, lo que he hecho, lo mucho que la gente me conoce' No", alegó Arrarás.
No obstante dio a entender que ella sabía perfectamente a qué se debía su despido. "Eso no sirve de nada porque estas son decisiones corporativas en medio de una pandemia en que mandan a cortar 20 cabezas por show; entonces ¿qué pasa? Es un show que tiene 25 personas, digamos... el mío era un equipo limitado, tú no puedes quitar a 20 y quedarte con 5 y yo soy una de las 5...".
Fue en esta parte de la entrevista que reveló la fuerte suma de dinero que recibía como sueldo ya que agregó que "es imposible llevar el show al aire así, pero me quitaban a mí que me ganaba lo que se ganaban 20 y con eso resuelven el problema, entonces yo lo entendí".
La puertorriqueña, quien ahora forma parte de la cadena CNN en Español, aseguró que tomó su despido con mucha naturalidad y de buena forma. "Lo que pasa es que yo me quedé amiga de todos lo que están allí, todavía hablo con ellos. Yo me fui de allí de buenas, o sea todos mis jefes me llamaron, todos me querían invitar a cenar, a almorzar... Me sentí apreciada y entendí que fue una decisión corporativa por circunstancias fuera de mi control, no porque estaban midiendo mi control, no porque estaban midiendo mi talento ni lo que yo estaba rindiendo en la compañía y que estaban disgustados, no tenía nada que ver con eso", argumentó.
Mari confesó que quedó contenta tras su despido ya que le pagaron 2 años y medio más del contrato, y aprovechó la ocasión para aclarar por qué todavía “sigue cobrando” en la televisora.
"Eso te lo paga un seguro que tienen las compañías de televisión, o sea que no viene del presupuesto del programa. La gente dice 'ay pero cómo te siguen pagando y te borraron y no era por dinero'. No, es que esas cadenas para contratos grandes tienen aseguradoras, entonces cuando pasan cosas como una pandemia, que es una fuerza mayor y que lleva a ciertos problemas económicos en la corporación, ellos acuden al seguro que me paga mi salario y evita que ese dinero salga del programa", explicó.