La vida de Franser Pazos no fue la misma a partir de 2015, cuando audicionó para ser uno de los concursantes de “La Voz Kids” de Telemundo. Con su impecable interpretación del complicadísimo tema “Creo”, de la española Natalia Jiménez, el chico cubano, que para en aquel entonces era un adolescente, impresionó a los exigentes jueces, quienes no dudaron en voltear sus sillas para luego decirle “eres increíble, vente conmigo”.
Tras una lluvia de halagos y de persuasiones, Franser escogió a Daddy Yankee como su coach, dejando asombrada y triste a la propia Natalia Jiménez, quien era parte del panel de jueces.
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Luego de estar varias semanas en el popular concurso de canto y de ser considerado uno de los máximos favoritos de la competencia, el adolescente no logró ganar el primer lugar.
Franser Pazos, eres una máquina de talento. Honras a los artistas que interpretas. Te mereces ganar @LaVozKids #live pic.twitter.com/6lISvhhLNF
— Daddy Yankee 🐐 (@daddy_yankee) June 8, 2015
Todavía muchos recuerdan o sienten nostalgia por la potente voz de aquel niño que cautivó al público en el concurso que le abrió las puertas. Muchos aún vibran con esa primera presentación y de su entrega en el certamen.
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Después de pasar por ese reality show, y en diferentes años, Franser probó suerte en otros concursos televisivos de canto, sin embargo, en ninguno de ellos la suerte estuvo de su lado, ya que no logró obtener el primer lugar.
Hoy, siete años después de aquella memorable interpretación, Franser vuelve a llamar la atención, pero esta vez por su sorprendente transformación física. Y es que, a sus 20 años, no queda ni la sombra de aquel chico soñador.
Su increíble “metamorfosis” no solo ha incluido la reducción de peso, sino también su radical cambio en sus facciones. Y es que hoy en día el joven artista posee unos labios voluminosos, pómulos y barbilla prominentes y cejas más delineadas. A todo esto, se le suman el abundante maquillaje y la ropa vanguardista, que le da un aspecto más sofisticado.
Franser ha modificado su apariencia, pero lo que no ha cambiado es su innegable y sorprendente talento.