Jada Pinkett Smith apareció por primera vez en público tras el escándalo de Will Smith en la entrega de los premios Oscar. Desde su programa Red Table Talk la esposa del actor dejó clara su postura respecto a este tema que ya ha tocado muy profundo en el seno de su familia.
Mientras el interprete de "En busca de la felicidad" permanece en una clínica de retiro para famosos, la también actriz estrenó la quinta temporada de su programa de entrevistas trasmitido por Facebook Watch en el que si bien evitó hablar directamente de la polémica bofetada de su marido, no omitió referirse a esta.
Al inicio del programa aparecieron un par de mensajes en la pantalla: "Considerando todo lo que ha sucedido en las últimas semanas, la familia Smith se ha centrado en una profunda curación", se leía. En el mismo Jada añadió que "algunos de los descubrimientos que hemos hecho sobre nuestra curación se compartirán en la mesa cuando llegue el momento".
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Hasta entonces, dijo la actriz, su espacio de entrevistas seguirá ofreciendo "poderosos, inspiradores y sanadores testimonios".
Medios de prensa rosa han señalado que este escándalo habría socavado aún más el matrimonio que ha venido presentando dificultades desde hace un tiempo, incluso se habla de rumores de divorcio.
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De hecho, la postura que la esposa del actor ha mantenido luego del incidente ha dejado asombrados a muchos de sus seguidores pues aseguran que son más de ataque a su marido que de apoyo.
Lo anterior habría dado lugar a que tomaran fuerza unas polémicas declaraciones que Jada hizo en el pasado en las que dijo que ella nunca quiso casarse con Will; y que si lo hizo fue porque su madre la presionó.