El mundo del espectáculo está de luto tras el fallecimiento de la gran actriz mexicana, Anabel Gutiérrez quien partió de este mundo, el pasado 21 de agosto, a la edad de 83 años.
Su trayectoria actoral está plagada de grandes éxitos. Anabel destacó en películas como Muchachas de Uniforme (1951), Deseada (1951), Rostros olvidados (1952), La visita que no tocó el timbre (1954) y Escuela de vagabundos (1955).
Pero su trabajo no se limitó al cine, pues Gutiérrez también incursionó en telenovelas como México 1900 (1964), Locura de amor (2000), Bajo la misma piel (2003) y Lola, érase una vez (2007) entre otras.
Su talento también la llevó a probar las mieles de la comedia de la mano del genio Roberto Gómez Bolaños quien la incluyó en el exitoso programa de “Los caquitos”. En donde Anabel interpreto magistralmente a “doña Espotaverderona”, mamá de la Chimoltrufia.
Sin embargo pese al éxito que tuvo con el comediante “Chespirito” existía un ambiente hostil en el set. Un detalle que lamentablemente, con su muerte, revivió el “oscuro” recuerdo de la pésima relación que tuvo con Florinda Meza.
De hecho en una ocasión, la misma Anabel habló al respecto. Al menos así lo indican medios mexicanos en donde hacen referencia a unas declaraciones de Televisa. “No digo que sea mala persona, pero tenía un carácter muy difícil. El día que me llamó Roberto, Florinda me dijo: ‘Te voy a llevar al camerino’. Dije: ‘¿A mí, al camerino? ¿Para qué, Florinda?’. ‘Para enseñarte a ser actriz’, respondió. Le dije ‘¡Ah!. Bueno’. ‘Actriz eres de cine, pero de televisión no’, aclaró, y le pregunté: ‘¿Cuándo quieres que vaya al foro?’”, reveló en una ocasión Gutiérrez.
Afortunadamente pese a esa desafortunada situación, Anabel logró brillar dándole vida a “doña Espotaverderona”, tanto así que Chespirito la incluyó en varios de los episodios de su exitosa comedia.