Muy pocos sabrán que el actor argentino, Saúl Lisazo, antes de conquistar el corazón del público de las telenovelas era un futbolista. Afortunadamente el cambio le vino bien pues llegó a ser uno de los galanes más cotizados en los años 80 y 90.
Lisazo, quien supo destacar por su talento, también era reconocido por ser considerado la versión latina del actor norteamericano Richard Gere.
Fueron muchos los melodramas en los que destacó; uno de ellos fue la novela “Acapulco cuerpo y alma”, en donde compartió pantalla con Patricia Manterola. También trabajó junto a Victoria Ruffo en “vivo por Elena”; y en “Amor de nadie” trató de ganarse el amor de la protagonista, Lucía Méndez.
Pese a que nunca ha dicho por qué dejó su rol de galán de telenovelas, lo cierto es que poco a poco fue abandonando la pantalla chica y cambió de rubro profesional.
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A sus 66 años, Lisazo se dedica a su faceta de restaurantero. Además ha aprovechado par a disfrutar del avida familiar junto a su esposa Mónica Viedma con quien se casó en 1983.
Pero al parecer Saúl no está cerrado del todo a los proyectos televisivos. Pues recientemente participó en Betty en NY, remake de la exitosa novela colombiana, Betty la Fea.