Los espacios alternativos del arte y la cultura son proyectos que surgen desde la inquietud de experimentar en grupos de amigos y colegas, esto con el propósito de romper el molde de los espacios normativos públicos y privados como museos, centros culturales estatales o galerías comerciales por mencionar algunos ejemplos.
Algunos factores que provocan la "efervescencia" de esta alternativa son el elitismo en el arte tradicional, la exclusión, la necesidad de independencia y la reivindicación política y social o las crisis que puedan existir en el mercado del arte en cada contexto.
El epicentro de la poesía en San Salvador
Fabio Rivas Rivera es el gestor principal del centro cultural Leyla. En entrevista con El Diario de Hoy comentó que para él crear —en colaboración con otros artistas— un espacio como este surge de una profunda necesidad de tener un sitio adecuado para generar una dinámica artística que sea diversa y principalmente enfocada en promover y cultivar la poesía.
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"En un contexto como el nuestro, de censura y represión, me parece que es casi obligatorio (si uno puede) gestionar la creación de espacios, porque en los recitales tenemos nuestras catarsis, lloramos, reímos, amamos y hacemos una especie de terapia, de la que a menudo ni nos enteramos", expresó.

Leyla tiene cerca de un año de haberse gestado en la 8ª avenida norte en San Salvador, luego de un largo trayecto de prueba-error y de un proyecto anterior llamado Astrálabe, que se caracterizó por una dinámica parecida, con una agenda de actividades diversas que podían sostenerse gracias al apoyo económico de los asistentes y de otros artistas.
La creación de este nuevo centro cultural se inspiró en dos personas importantes en la vida de Fabio, su abuela Leyla y la poeta Claudia Lars.
La agenda del lugar incluye talleres de dibujo, pintura y escritura creativa, por mencionar algunos. Su actividad principal son los Viernes de Poesía, cada vez son más las personas que llegan a compartir sus textos y otros a escucharlos.
Para Rivas la poesía es importante por el simple hecho de que es parte elemental de la existencia humana, "es como respirar, como comer, la escritura y la pronunciación en voz alta es un gran ejercicio para acercarnos a la poesía, nombramos lo que nos desagrada, lo que nos intriga, lo que nos emociona o sorprende; encontramos un eco en las palabras ajenas y respiramos de alivio o de angustia, nos recuerda la otredad al mismo tiempo que nos aclara ciertas búsquedas".
Libros y café para reforzar la comunidad
Libertad Cuéllar ha creado el espacio Ubuntu en la colonia Layco, tiene como objetivo crear comunidad entre personas que gustan de la lectura, el arte y el reciclaje. Para ella "lo bueno se comparte", por lo que ha ambientado la casa de su familia como un lugar perfecto para los amantes de la lectura.

Rodeado de libros que han sido rescatados y otros donados, este es un lugar abierto y con vegetación, en donde se sirve buen café en prensa francesa y snacks. Es un local adecuado para compartir más que una lectura o hacer "home office".
Aquí artistas emergentes y reconocidos ya han presentado más de una vez sus obras artísticas, también han compartido conocimientos a través de talleres prácticos de escritura y artes plásticas.
Ubuntu es un sueño hecho realidad para Libertad, pues siempre quiso cimentar un sitio donde podría combinar las cosas que le gustan, como la lectura, el arte, la convivencia y el café. El horario es de miércoles a sábado de 1:00 p.m. a 6:00 p.m.
Un espacio para hacer las cosas diferentes
En la calle Las Palmas de la colonia San Benito se encuentra el laboratorio de cine, arte y cultura La Colmena, que es uno de los espacios que está construyendo una comunidad diversa y creativa.
Pablo Ramírez y Gabriel Granadino son parte de los gestores de este lugar que surgió tras el proyecto Imagen Films, para proponerle a San Salvador una plataforma diferente, que posicione el arte y para que los artistas tengan dónde desarrollarse.
"Siempre hay que sumar al arte, es para lo que más vale la pena sumar", comentó Granadino, quien cree que desde distintas propuestas artísticas "hay muchas cosas qué decir y pensar".
"Este es un buen lugar para reunirse y platicar sobre qué es lo que queremos decir como artistas", agregó.

Ramírez planteó que este proyecto, que tiene mucho tiempo "cocinándose", se enfoca en consolidar el respeto y el posicionamiento del arte como trabajo diario: "Queremos que mucha más gente pueda desarrollarse en el ámbito profesional como artistas".
Por su parte, Pablo destacó que la principal misión de este espacio es que se escuche "música diferente, que se coma comida diferente y que se vean artes diferentes".
Sin embargo, Granadino recalcó que este sitio es igual a otros que se han gestado de manera independiente y que tienen el importante reto de ser autosostenibles, lo que solo se logra con el apoyo de la gente, "principalmente que aporten su presencia y sus ganas de compartir ideas que ayuden a posicionar el arte que se cree en este espacio".
Pablo afirmó que el éxito del proyecto puede obtenerse también con un equipo sólido que se apoye entre sí, para fortalecer las tres bases de trabajo, que son: la académica, para montar talleres artísticos de todas las ramas posibles; una agenda cultural constante con conversatorios, convenciones, cenas temáticas, conciertos, etc.; y la rentabilidad de los espacios que se ofrecen para co-working y comercio.
Puedes comunicarte con ellos a través de lacolmena.laboratorio@gmail.com.
La galería de arte que une simbólicamente lugares y conceptos
En la colonia Merliot se ubica la galería experimental para las artes visuales Espacio 42B; este es un proyecto colaborativo entre la artista visual Lucy Tomasino, Óscar Moisés Díaz, David Osegueda (Dosemil), Guillermo Tomasino y Mauricio Kabistán.

Lucy explicó que la idea de "E-42B" surgió a partir de pláticas y reflexiones sobre la necesidad de crear un espacio para artistas talentosos que, por diversas razones, no han tenido la oportunidad de realizar propuestas de exhibición individual: "Pensamos que responde a que en nuestro país hay pocos espacios independientes de exhibición, así como también pocos espacios que brindan acompañamiento curatorial que permita a los artistas potenciar sus propuestas".
La artista visual añadió que es importante ampliar los espacios independientes de arte, porque permiten diversificar las voces y propuestas que muchas veces quedan fuera de los espacios tradicionales: "Estas plataformas fomentan la experimentación y eso es importante para generar un impacto en la cultura".
El nombre de Espacio 42B tiene un significado representativo, pues según Lucy Tomasino, se inspiraron en la ruta de transporte público que transita desde el Centro Histórico hasta Santa Tecla y que pasa cerca de la galería, uniendo simbólicamente lugares y conceptos.
Comunidades artísticas cruciales
Crear comunidad es una necesidad básica humana, la colaboración y creación colectiva facilitan proyectos que pueden ser impactantes en distintos aspectos sociales y significativos con el paso del tiempo.
Esto permite también la visibilidad de los involucrados y encontrar mejores y diversas oportunidades profesionales.
Actualmente, dos comunidades que se encuentran activas son la de fotografía análoga conocida como Camarita Vieja y el colectivo de ilustradores Tarde Noche.
Camarita Vieja
Mariana Cabrera explicó que esta comunidad comenzó como un grupo de amigos conformado por Natalia Mendoza, Carlos Siri, Mauricio Salguero, Roberto Mayorga y Lourdes Lecha, quienes conectaron por el amor a la fotografía análoga.

"Pensábamos que en el país era difícil encontrar estos espacios de gente que le guste lo mismo, pero cuando empezamos a crear convocatorias para reunirnos para hacer fotos nos dimos cuenta de que había muchas más personas con la misma pasión", señaló.
Para fortalecer esta comunidad, se realizó un Meet- Up Analógico en La Colmena el pasado 1 de febrero, para salir de las redes sociales y conocerse entre los integrantes de la comunidad, aprender sobre fotografía con un conversatorio con Roberto Anaya e inspirar a otros a través de una exposición fotográfica y la muestra de la colección de cámaras antiguas de Leonidez Hernández.
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"Para mí la fotografía es documentar la experiencia humana, no todas las fotos tienen que ser perfectas y eso ha generado un espacio de confianza en quienes sienten lo mismo, que ven en la foto análoga una forma de aprender y de equivocarte, a diferencia de la foto digital, que es igual de increíble, pero más rápida", detalló Cabrera.
La fotógrafa cree que hacer comunidad es importante para apoyarse entre sí: "Es necesario para las relaciones humanas, es algo que te llena en tu vida".
Tarde Noche

Este es un colectivo de ilustradores y pintores salvadoreños que busca impulsar el talento de diferentes artistas contemporáneos.
A través de la unión con otros espacios comerciales y marcas, constantemente promocionan el arte local, la educación, fomentan el bienestar mental y social, aparte de revitalizar los espacios.
Los integrantes de este conjunto expresaron que buscan no solo promover el arte, sino que también tejer redes culturales y sociales que enriquezcan la vida de las personas y fortalezcan la identidad de la comunidad.
Actualmente, esta comunidad de artistas tiene como sede La Colmena, ambos han creado una alianza para crear actividades interactivas, talleres y crear más eventos para que la comunidad se conozca y comparta.
Estos diferentes espacios y comunidades puedes encontrarlos a través de sus redes sociales, en donde promueven las actividades que realizan.
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