Los sitios con valor universal como lo es el sitio arqueológico de Joya de Cerén en El Salvador, único Patrimonio de la Humanidad del país, pueden perder ese estatus.
Si las naciones no conservan y protegen el valor que hace únicos a estos lugares, la UNESCO puede retirarlos de su famoso listado como ya ha ocurrido antes.
Los Centros Históricos pueden colarse en la lista, como lo hizo en 1978 el de Quito, Ecuador, uno de los que se conservan mejor a nivel mundial.
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Y si bien, el desarrollo y la modernidad no pueden detenerse, estos no necesitan reñir con la historia. El reto es integrarlas en un mismo espacio y cohabiten en pro de la identidad de una nación.
Por ello, profesionales, intelectuales y académicos en El Salvador recomiendan ejecutar los proyectos de revitalización del Centro Histórico de San Salvador -que ostenta dicho título desde 2008 por decreto legislativo- de la forma más adecuada, a fin de recuperar, conservar y proteger el valor histórico que posee.
Acá retomamos una nota publicada por el periódico español ABC en junio de 2021, en la que detalla tres sitios que fueron retirados por la UNESCO de la lista de Patrimonio de la Humanidad que perdieron el valor universal que poseían, para ilustrar que los lugares sí pueden perder su singularidad frente a la modernidad.
1. El puerto de Liverpool, en Inglaterra. Fue inscrito en 2004 como testimonio del desarrollo, como uno de los principales centros comerciales del mundo en los siglos XVIII y XIX. Pero la realización de una serie de proyectos urbanísticos minaron la autenticidad e integridad del espacio protegido.
2. Paisaje cultural del valle de Elba, en Dresde, Alemania. Fue inscrito en 2004 y dos años después ya figuraba en los sitos en peligro. Fue retirado debido al proyecto de construcción del moderno puente WaldschloBchen. El paisaje cultural fue creado entre los siglos XVIII y XIX.
3. Santuario del Oryx, en Omán. Fue inscrito en 1994 y expulsado en 2004, porque el sultán Qabus bin Said Al Said (fallecido en 2011) redujo en un 90 % el tamaño de la reserva en el desierto donde vivían los últimos oryx (antílopes con apariencia de caballo).