Con dos pinceles entre los dedos de los pies, dos en las manos y mucha concentración, la artista neerlandesa Rajacenna van Dam pinta 10 cuadros simultáneamente en un museo de los Países Bajos.
Un astronauta, un autorretrato, un panda con gafas y otros siete cuadros brotan de su pincel, pintados sobre 10 lienzos colocados sobre una mesa, en el suelo y en dos caballetes.
Te puede interesar: La UES inauguró la exposición colectiva "Visiones"
Todo empezó como un reto para la artista de 31 años, pero ahora se ha vuelto algo muy serio. Brazos y piernas extendidos, una pincelada por aquí, otra allá, Rajacenna -su nombre artístico- es perfeccionista y planeó todos sus gestos de antemano en su cabeza.
"Trabajo un poco en un lienzo y luego paso a otro, así que estoy constantemente dividiendo mi atención entre todas las pinturas", explica a la AFP esta artista originalmente zurda.
"Hace cinco años comencé a pintar con las dos manos, como un pequeño reto para ir más rápido, y descubrí que en realidad era ambidiestra", cuenta.
Un día un periodista le preguntó en tono de broma si también podía pintar con los pies. Entonces, probó, "por diversión".
Lee también: Entre mantras y tintas, Ronald Morán engrandece a El Salvador en Venecia
Tras algunos percances con cinta adhesiva, intentó utilizar plastilina para mantener el pincel entre los dedos. Resultó ser un éxito y publicó un video de su hazaña en internet que se hizo viral, y le comenzaron a llover los pedidos.
Sólo ella puede distinguir las pinturas hechas con las manos de las hechas con los pies. "Son un poco menos precisas", dice sobre las segundas, mientras exhibe sus habilidades en un museo de Vlaardingen, su ciudad natal en el sur de los Países Bajos.
“INCREÍBLE”
A Rajacenna le encantaba dibujar desde que era pequeña. Tras una breve pausa durante la adolescencia, un artista callejero italiano reavivó su pasión.
Hoy sus videos en las redes sociales suman millones de vistas, sobre todo cuando pinta 10 lienzos a la vez con las manos y los pies.
"Me aburro muy rápido, así que me gusta lanzarme desafíos. Hacer todo esto al mismo tiempo me pone en un estado de meditación, me calma mucho", explica.
También dice que espera que esta iniciativa haga que "la gente se anime a hacer más cosas, a desafiarse un poco más".
Sus cuadros se venden por entre 6.000 y 12.000 euros (entre 6.450 y 12.900 dólares), precisa su padre, Jaco van Dam.
"Nos sorprende mucho, no sabemos cómo se arregla para hacerlo", comenta sobre su hija.
En una pared del museo está colgado un retrato de Einstein pintado por ella. Un guiño a un estudio que está realizando sobre el cerebro de la artista el neurocientífico turco-alemán Onur Gunturkun, que afirma que la mujer "es capaz de hacer cosas que los neurocientíficos consideran imposibles".
"Un escáner cerebral mostró que los hemisferios izquierdo y derecho de su cerebro están tres veces más conectados que la media", explica Gunturkun.
La artista ha captado la atención de algunas celebridades, como el cantante Justin Bieber, que tachó su trabajo de "increíble" al ver un retrato suyo.
Su don provoca admiración entre los visitantes del museo.
"Es extraordinario que alguien sea capaz de hacer eso", estima Anton van Weelden, de 75 años.
"¡Yo no lograría hacer algo semejante ni con mi mano derecha!", agrega el hombre entre risas.