La Universidad Tecnológica de El Salvador (UTEC) se ha consolidado como una institución de prestigio, reconocida por su excelencia académica, innovación y formación integral de profesionales altamente competitivos.
Una de las mayores fortalezas del referido centro de estudios superiores es la promoción de la investigación y vinculación social, impulsada desde su Vicerrectoría de Investigación y Proyección Social.
De acuerdo con la doctora Noris López, vicerrectora de Investigación y Proyección Social de la UTEC, este impulso se materializa a través de dos líneas principales: la investigación formativa y la investigación institucional.
La investigación formativa es promovida en toda la oferta académica de la UTEC (en cada cátedra) e integra a los estudiantes desde los primeros años de su carrera, brindándoles la oportunidad de desarrollar competencias investigativas y esenciales para su desarrollo profesional.
Por su parte, dentro de la investigación institucional, la Universidad cuenta con el programa de "Ayudantes de Investigación", orientado a facilitar a los estudiantes de las diferentes carreras la participación en importantes proyectos, trabajando de la mano con investigadores experimentados de la UTEC.
En ambas líneas, el elemento clave es la vinculación social, pues la UTEC busca generar conocimientos académicos, y asegurarse de que estos tengan un impacto positivo en las comunidades.
Estudio sobre la separación familiar en El Salvador
Un ejemplo reciente de este compromiso de la UTEC con la investigación de impacto es el estudio titulado "Factores clave que contribuyen a la separación familiar", realizado en alianza con Aldeas Infantiles SOS y liderado por la licenciada Paola Navarrete, graduada e investigadora de la UTEC, junto con la doctora Chrissie Gale, investigadora del Reino Unido.
Navarrete, quien durante su formación también fue parte del programa "Ayudantes de Investigación", destacó que el objetivo principal del proyecto era identificar las razones detrás de la separación familiar en El Salvador, con la intención de apoyar la creación de políticas públicas y programas que fortalezcan a las familias, evitando así la colocación de niños y niñas en cuidado alternativo.
"En la UTEC brindamos una educación integral a nuestros estudiantes, a través de la articulación entre la docencia, la investigación y la proyección social. No solo formamos profesionales competentes, sino que también los preparamos para ser agentes de cambio".
Noris López, vicerrectora de Investigación y Proyección Social de la UTEC.
Entre los hallazgos de la investigación, se encuentran la violencia doméstica y la pobreza extrema como los principales factores en la separación de los niños y niñas de sus familias. La falta de comunicación y apoyo emocional también juega un papel importante en la desintegración familiar, aumentando el riesgo de que los menores sean ubicados en sistemas de cuidado alternativo.
A la vez, el estudio reveló que las decisiones sobre la colocación no siempre están bien fundamentadas debido a la falta de personal capacitado y recursos en el sistema de protección infantil.
Un aspecto innovador de la investigación fue contar con los testimonios de los menores, quienes compartieron sus experiencias. Para incluir sus voces, las coautoras implementaron una metodología ética y rigurosa a través de talleres.
"El más reciente estudio que realizamos fue parte de un convenio formal de colaboración con Aldeas Infantiles SOS, a fin de generar datos que sirvan de base para la toma de decisiones, llenando un vacío de evidencia en el país sobre la separación familiar".
Paola Navarrete, investigadora de la UTEC y coautora de la investigación.
El impacto de este proyecto ha sido tan notable que su metodología ha sido replicada en otros países, como Uruguay, donde la licenciada Paola tuvo la oportunidad de capacitar a investigadores locales.
Además, los resultados del estudio serán presentados en un informe global en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), junto a investigaciones realizadas por otros países como Dinamarca, Costa de Marfil, Indonesia, Kenia, Kirguistán, Líbano y Uruguay.