Por L. Puente
Uno de los platillos más deliciosos de El Salvador es la cena típica, que incluye esa mezcla de olores y sabores a plátanos recién fritos, huevo, crema, queso, chorizos, tomatada, tortilla tostada y, por supuesto, los frijoles en cualquier presentación.
Sin embargo, el toque especial de esta comida lo brinda el casamiento, comparte la familia Doratt. Ellos son santanecos y se consideran amantes de este platillo; pues pueden comerlo todos los días y siempre lo disfrutan juntos alrededor de la mesa.
“Para nosotros este es un manjar salvadoreño, mi mamá cuando viene de trabajar siempre nos prepara la cena así, con platanitos, huevito picado, queso o crema, aguacate (si hay) y frijolitos. Pero, cuando hace casamiento es otro nivel”, dice Luis, el menor de los dos hermanos Doratt.
De acuerdo con Celia de Doratt, quien se encarga de dar vida a este plato; tanto sus hijos como su esposo, no pueden resistirse a la receta especial de casamiento que prepara; pues la realiza con amor e ingredientes frescos.