En la Selección Sub 20 que disputa el Premundial de Honduras hay un atacante de apellido Mariona. Su nombre es Javier, y es nieto del mítico Salvador Mariona, el excapitán de la Selecta Mundialista de México 1970.
Revulsivo, el ariete ha entrado de cambio en los dos juegos disputados en Honduras, tanto ante Guatemala como contra Aruba, y, ante este último, fue la figura del encuentro al anotar doblete en la remontada del 0-1, que terminó con victoria nacional por 4-1.
Entre otras cosas, destacó que los goles no fueron solo cosa de él, sino de grupo, y que está en su sangre no dejar de luchar.
"Estamos muy alegres de haber podido remontar, tengo que agradecer a cada uno de los compañeros en cancha, de la sangre combatiba en cancha y tener esa presentación para ganar", dijo al departamento de prensa de la Concacaf tras el encuentro.
Al ser consultado sobre qué hizo que la Selección siguiera luchando, mencionó: "Es algo que está en nuestra sangre, es algo que forma parte de la cultura de salvadoreño, nosotros nunca paramos de luchar, hasta el momento del resultado final. Nosotros sabemos que si queremos continuar y seguir por nuestros sueños, la clasificación al Mundial y a los Juegos Olímpicos, sabemos que no podemos dejar de luchar, así que es eso, dar el 100%, el 120% por nuestro país".
Posteriormente, declaró en zona mixta que fue "importantísimo meter los dos goles, pero no fui solo yo, todo el equipo metió los dos goles, solo quiero decir gracias a todo el equipo, no fui solo yo el que hizo esos goles. Al final, es quien pelea más y quien tiene más corazón, yo creo. Ahora, vamos al hotel y nuestra primera cosa en la mente es recuperar nuestros músculos y prepararnos mentalmente para el partido del jueves", concluyó.