En seis días se ha vuelto este atleta francés de 22 años, ejemplar y modelo, transformarse en campeón olímpico de natación con ¡4 medallas de oro! 4 títulos olímpicos en menos de una semana. Leon Marchand, es la nueva figura icónica de los Juegos de París 2024.
Después de los 400 metros estilos, 200 metros mariposa y 200 metros braza, ganó el viernes el 200 metros estilos. Entre el domingo pasado y el 2 de agosto, logro colgar alrededor de su cuello 4 medallas de oro. Y a la vez, se aproximó al récord mundial de Michael Phelps, la leyenda contemporánea de natación con el cual comparte su entrenador, Bob Bowman y del mejor tiempo, todavía detenido por el norteamericano Ryan Lochte.
Por cierto, Leon Marchand, después de los Juegos de Tokio en 2021, se fue para los Estados Unidos, a la Universidad del Arizona, inscribiéndose en el club universitario de los «Sun Devils Arizona University», se dedicó a la competición.
Ya no se sabe cuál de los dos escogió al otro, pero sabía que el entrenador de Michael Phelps era el mejor técnico en el mundo de natación combinada. Y sin duda, Bob Bowman había detectado el potencial del nadador que ya era triple campeón de Francia. Por haberlo pensado y por ser rodeado por una familia cuyos padres fueron ellos mismos, campeones de natación, llegó a los Estados Unidos con la voluntad de adquirir una técnica que podía procurar victorias y a la vez, garantizar una serenidad que le da fuerza y control, tal como lo dice, sobre su paz mental.
Clausurando el último evento olímpico en natación individual, demostró que había escogido bien su camino, acercándose a la leyenda contemporánea de Michael Phelps. En medio de este último evento, logró apartarse del británico Duncan Scott. Con 1'54'06, hizo mejor su propio récord de Francia (1'54'82) obtenido en los mundiales de 2023. Y sobre todo, logró ser mejor que Michael Phelps en Atenas 2004 (1'54'23), acercándose al récord del mundo obtenido por Ryan Lochte (1'54'00).
El campeón originario de Tolosa, la ciudad de la industria aeronáutica ubicada en el suroeste de Francia, hizo su llegada en el olimpo del deporte francés. Como si fuese una evidencia, con la sonrisa, una superioridad técnica y una calma que llamo la atención. Después de la sorpresa, un movimiento de afección y ahora de pasión aumentada por el respeto, ganó el publico. Para él puede ser que el objetivo sea lograr en ser mejor que su modelo norteamericano que todavía lo supera con 5 títulos individuales.
Leon Marchand alimenta el fenómeno de pasión francesa revelada desde que empezaron los Juegos Olímpicos 2024. París, en pocas horas, se convirtió en un espacio de participación deportista, pero también ciudadana.
El corazón del verano del mes de agosto, la grandeza de los lugares exteriores de los eventos olímpicos, la necesidad sin duda de cambiar de atmósfera después de semanas electorales y meses de tensiones de todo orden, pueden explicar un fenómeno que coincide con la figura de Leon Marchand: serenidad, determinación. Y sobre todo, felicidad en intentar, dando lo mejor de si mismo, para alcanzar y superar lo que parecía un sueño imposible. Leon Marchand demuestra que el cielo es el único límite.