La atleta bareiní Winfred Yavi se impuso el martes en París en la prueba de los 3.000 metros obstáculos femenino y arrebató el trono olímpico de la distancia a la ugandesa Peruth Chemutai, que se conformó con la plata.
Yavi, nacida en Kenia hace 24 años, batió el récord olímpico con un crono de 8:52.76 y suma este título al oro mundialista de Budapest-2023.
Chemutai logró a su vez un récord nacional con 8:53.34, mientras que el bronce fue para la keniana Faith Cherotich, con un crono de 8:55.15.
"Cumplí el plan de carrera que había diseñado. Estoy feliz de ver que funcionó", dijo la ganadora, que habló de "un sueño hecho realidad" con este oro en París.
El oro de Yavi es un triunfo irónico, si se quiere, después de que quisiera representar a Kenia en múltiples ocasiones, pero no lo consiguiera. La competencia en esos países africanos es fortísima, y quiso representar a su nación a los 14, a los 15 y también a los 16 años. Nunca destacó tanto como para ser tomada en cuenta.
Así, eventualmente encontró el apoyo en Bahrein que adoptó a Yavi como su hija, y, como un golpe del destino, en la final en París se colgó el oro superando a la mejor de su país de origen, la keniana Cherotich, que cerró tercera.
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