España se coronó campeona de Europa al vencer ayer a Francia 88-76 en la final disputada en el Mercedes Benz Arena de la Ciudad de Berlín y obtuvo su cuarto oro en este certamen tras los obtenidos en 2009, 2011 y 2015. Sin contar con superestrellas en su plantel y con el italiano Sergio Scariolo como genio en el banquillo español que supo sacar lo mejor de cada uno de sus jugadores la selección española en contra de todo pronostico pasa a la historia como la tercera mas laureada en este torneo.
La final se caracterizó por el dominio español que llego a tener ventaja de hasta veintitrés puntos en el segundo cuarto gracias a su acierto desde el triple con Juancho Hernangómez (6/9 desde detrás del arco como su mejor hombre) y su férrea defensa evitando el juego fluido y cerrando la pintura a los hombres altos de Francia. Aun así, la selección gala se fue al descanso perdiendo por diez puntos (47-37) gracias a que mejoro la rotación del balón y tomo mejores decisiones al ataque. Había partido
Francia salió con una velocidad extra al inicio de la segunda mitad y logro reducir distancias a tres unidades ya que empezó a acertar más desde detrás del arco y hombres como Yabusele, Heurtel y Fournier lograron encontrar a los compañeros mejor posicionados para anotar. Tras tiempo muerto de Scariolo España supo reaccionar y volvió a aumentar la ventaja a dos dígitos. A partir de ahí la buena gestión de las rotaciones del banquillo por parte del técnico español no permitió a Francia acercarse a menos de seis puntos. Los galos lucharon con lo que pudieron durante el
último cuarto, pero no les alcanzo para darle la vuelta al partido. A falta de cuatro minutos para el
final del partido la diferencia era de dos dígitos y ya España sabía que ese título era suyo y no lo
iba a dejar ir.
Juancho Hernangómez fue el mejor de España con 27 puntos y 7/9 en triples (segundo mejor registro en la historia del torneo), su hermano Willy con 14 puntos y 8 rebotes fue elegido MVP del torneo, Lorenzo Brown con 14 puntos y 11 asistencias y Jaime Fernández con 13 unidades y el liderazgo del capitán Rudy Fernández fueron los elementos clave de esta selección, sin embargo, cada uno de los demás jugadores tuvieron un aporte importante en los minutos que estuvieron en cancha.
España se lleva un merecido título demostrando que el trabajo colectivo esta por encima de las individualidades, ya sea en el baloncesto o en cualquier deporte de conjunto y de que las defensas ganan campeonatos, además el técnico Scariolo supo inculcar en cada jugador el convencimiento de que no importando el rival que tuvieran enfrente no podían sentirse inferiores y que la competitividad iba a convertirse en su filosofía de cada día en el torneo.
El camino a la final España gano el primer lugar del Grupo A tras vencer a Bulgaria y Georgia luego perdiendo contra
Bélgica y luego ganando a Montenegro y Turquía, en octavos de final le toco uno de los cocos del torneo, Lituania, cuarta clasificada del Grupo B y una de las candidatas a podio, en cuartos la difícil y sorpresiva Finlandia y en semifinales sufrió ante la local Alemania a quien venció en los últimos minutos del juego.
Francia quedo tercera del Grupo B tras iniciar perdiendo ante Alemania, luego venciendo a Lituania, Hungría y Bosnia Herzegovina y cerrando la fase de grupos cayendo ante Eslovenia. En octavos y cuartos ante Turquía e Italia estuvo a punto de ser eliminada y gracias a los errores de sus rivales pudo ganar ambos partidos en la prórroga, en semifinales aplasto a Polonia que venia de dar el campanazo al vencer a la Eslovenia de Luka Doncic.
Este campeonato europeo podría catalogarse como el mejor de la historia por el nivel competitivo y la cantidad de estrellas que asistieron con sus selecciones, sin embargo vimos como las que eran favoritas a alzarse con el oro decepcionaron en el torneo, tal es el caso de los ganadores de los últimos cuatro MVP de la NBA, el griego Giannis Antetokoumpo y el serbio Nikola Jokic así como uno que puede ganarlo en los próximos años, el esloveno Luka Doncic que a pesar del esfuerzo que hicieron no pudieron llevar a sus selecciones a la disputa por el título. Serbia no paso de octavos al ser eliminada por Italia, y Grecia y Eslovenia se quedaron en cuartos ante Alemania y
Polonia respectivamente.
Aparte de esas decepciones el torneo vio el ascenso de selecciones como Finlandia liderada por el jugador del Utah Jazz Lauri Markannen que logro la segunda mejor anotación del torneo con 43 puntos (por detrás de los 47 que Luka Doncic anoto ante Francia en fase de grupos) y la gran sorpresa fue Polonia que logro llegar a semifinales por primera vez desde 1967, su jugador insignia Mateusz Ponitka logro el tercer triple doble en la historia del EuroBasket (26 puntos 16 rebotes, 10 asistencias), en la victoria ante Eslovenia, solo el croata Toni Kukoc en1995 y el rumano Andrei Mandache en 2017 lo habían conseguido. La selección polaca pudo colgarse el bronce en la
disputa por el tercer puesto, pero cayó ante Alemania, pero eso no quita méritos a lo que logro.
Hay futuro en este equipo. La selección teutona fue otra de las que mejor juego hizo y se va con un meritorio tercer puesto. El quinteto ideal del EuroBasket fue: Lorenzo Brown y Willy Hernangomez de España, Giannis Antetokoumpo de Grecia, Rudy Gobert de Francia y Dennis Schroeder de Alemania. Sin duda los amantes del baloncesto hemos gozado de un torneo de alto nivel el cual recordaremos durante mucho tiempo, mientras tanto a esperar el próximo.
Hasta Polonia, Chipre, Letonia y Finlandia 2025.