En un lapso de dos fechas se han convertido dos golazos para destacar en el fútbol salvadoreño. Y, en ambos casos, lo hicieron jóvenes de 21 años, con la consigna de que el talento puede hacerse su espacio en condiciones tan desfavorables y en una liga tan devaluada como lo está hoy la salvadoreña.
Josué Artero, del Once Deportivo, le marcó al Alianza el domingo 24, después de un sombrerito y una gran definición desde el borde del área para firmar un gol de gran factura, con una calidad individual para que no pase inadvertido.
El gol de Styven Vásquez al FASdirectamente fue de antología. Con los ojos bien abiertos, desde mitad de cancha metió un soberbio remate con la precisión y la potencia justa para recorrer más de 50 metros y colarse junto al travesaño en la meta del portero fasista Valle, para sellar un gol de esos de los que hacía bastante no se veían por estas canchas.
Son dos casos de jóvenes talentosos que sobresalen por su jerarquía en un ambiente hostil de un torneo marcado por los problemas de siempre:deudas, pésimos campos de juegos, desorden adentro y afuera. Y por si fuera poco también hoy deben esquivar los haters de las redes, aquellos que han querido instalar una de las falsedades más grandes que se han escuchado en estos tiempos:que no se puede halagar en los medios a un jugador salvadoreño ni un periodista puede elogiar a ningún futbolista, porque -según esta afiebrada teoría-, medios y periodistas “inflan” a los jóvenes, luego se agrandan y ya no vuelven a jugar al alto nivel (?). Absurda afirmación que no tiene sustento alguno pero que cada vez la escuchamos -y leemos- más-.
Lo mejor será que Josué, Styven y todos los jóvenes que buscan despuntar en esta maltrecha liga, sigan adelante, demostrando su talento fecha a fecha y busquen progresar en otros horizontes. Solo así podrán salir del pozo en el que hoy está inmerso el fútbol nacional. Y a los haters, ni respuestas.