La tormenta Julia hizo sus estragos en todos los niveles. Y en el fútbol también hubo víctimas. Esta vez, no se salvaron Melvin Cruz, jugador de CD Dragón, y sus familiares, quienes tuvieron que evacuar y abandonar todo. Y, no solo eso, ver cómo las pérdidas materiales también llegaron a la vida de muchos de sus vecinos.
Cruz, zaguero de los mitológicos, contó a CANCHA lo duro que resultaron las lluvias, por el tema de que afectaron a toda su comunidad en la colonia Santa María, cantón El Papalón, San Miguel. Pero, de igual forma, a su gente, a su sangre, ya que como familia tuvieron que dejar todo para salvar su vida.
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El jugador de Primera señaló que por la tormenta Julia los evacuaron, pero que Dragón como institución lo ayudó como no lo imaginó. El equipo migueleño extendió su mano para él y los suyos, como una forma de demostrarle lo importante que es para el equipo. Un gesto que él agradece enormemente.
"Mi familia y yo estamos muy bien, gracias a Dios. Después de todo esto, estamos en casa y estamos tranquilos que ya todo pasó", explicó sobre cómo se encuentran.
Luego, explicó qué les pasó y lo que vivieron. "El río Grande de San Miguel y una quebrada que está atrás de la comunidad se desbordaron y eso nos afectó a toda la comunidad", dijo
"Hubo unas casas que salieron muy afectadas, la cosecha de varios agricultores se perdió, pero esto así es, son cosas de la vida. Lo material se recupera, la vida de uno como persona es lo importante. Pero lo mejor es que todos estamos bien, no pasó a más y estamos con vida", reiteró el de los migueleños.
"Gracias a Dios, tenemos un gran presidente (de Dragón). Cuando nos evacuaron, se lo comenté al profesor Marvin (Benítez) y a mis compañeros, que nos llevarían al albergue de la Cancha Álvarez", contó de entrada.
Luego, añadió con alegría: "A los minutos, el profe Marvin me marcó. Me comentó que el presidente, don René Ventura, nos mandaría a mi familia y a mi persona a un Hotel, para estar mejor y más cómodos".
"Me comuniqué con los gerentes y me movilizaron hacia el hotel. Hablé con don René y me dijo que no me preocupara por los gastos, que todo iba a correr por él, que la salud de mi familia y la mía era muy importantes", enfatizó Cruz.
Para el elemento de Primera, quien estudia en la Universidad el profesorado en Educación Física y Deportes, junto a su familia están "muy agradecidos enormemente con él (Ventura). Ahorita, la ayuda que sea será bienvenida".
"Mi familia y yo estamos muy agradecidos con el señor presidente (de Dragón), cuerpo técnico y compañeros de equipo, porque estuvieron con nosotros en todo momento", comentó de nuevo.
En cuanto a cómo lo fortalecen estas pruebas como jugador y como ser humano, y también a su familia, afirmó: "Son pruebas para uno. Uno lo toma con bien. Como jugador, te influye bastante, porque al ver cómo toda la comunidad pasa por un momento así de su vida, uno quiere ayudarle después con granos básicos, pero a veces cuesta por lo económico".
"Esto te motiva a trabajar más duro, a poder ahorrar y para el día de mañana cuando tenga algo (de dinero) y pase unas cosas así poder tener y decirles: 'Yo los ayudo con los granos básicos para que se sustenten'. Esto uno lo toma como motivación para ser mejor jugador y saber por lo que uno quiere ser en la vida", expresó Melvin.
"Mi familia lo toma de buena manera, porque sabemos que estuvimos con la mayor prevención sobre esto. Nos motiva a estar más unidos y más llenos de amor, por todo lo que pasa y puede pasar", manifestó.
Cruz, quien estuvo en el ascenso de Dragón, y lleva ya un año y cinco meses con los escupefuegos, repitió algo clave que lo inspira a seguir: "Primero, es la salud de uno, lo material se recupera de a poco… Evacuamos, y ya que regresamos a casa no subió el nivel del agua y no se perdió nada en nuestro hogar. Pero en otras casas, sí se perdió algo".
Es por esto que el jugador oriental se solidariza con sus vecinos de la comunidad. Por todos aquellos que perdieron de poco a mucho, para que se puedan unir los que puedan y donen para sacar adelante a los demás. Un gesto noble. Y un jugador de gran corazón.