Un partido con múltiples ocasiones, y en donde las defensas se lucían por salvar en últimas instancias pese a los errores colectivos en cobertura (espacios, muchos en algunos tramos), se lo llevó Barcelona ante el Sevilla gracias a un rebote, mala suerte para los visitantes, o buena para los culés.
En propia puerta, el más pitado, Sergio Ramos, odiado en el pasado por los radicales del Barcelona en su paso por el Real Madrid, figura del Sevilla en su primera etapa, marcó la diferencia y pasó a ser el más aplaudido por los locales, en un claro gesto de sarcasmo de la vida, o del fútbol, si se quiere.
Era Sergio de los mejores en defensa para los visitantes, pero al 76' le cambió el destino al partido. Un centro pasado para Lamine Yamal, un cabezazo con sentido buscando a un compañero, y un Ramos que se atraviesa tratando de cortar, muy cerca, muy rápido todo. Ni despejó ni le pasó la bola al arquero, sino que se terminó encontrando la número 5 con su pierna y terminó en el fondo.
Antes, Barcelona había dominado a placer el segundo tiempo, y había sufrido en un par de ocasiones, como un cabezazo de Rakitic (ex culé) que se fue por nada, y después del gol, Kounde salvó el empate con una barrida espectacular.
También tuvo el Barcelona, de hecho más que su rival, la más clara, un bombazo de Joao Félix que le sacó pintura al travesaño. Se las perdió Lewandowski, porque la defensa le estorbó, lo intentó también Fermín, pero le entró mal a un balón a un metro del portero y a este se la pasó por querer definir.
Fue más el Barcelona, que fácil pudo también haber encajado un gol ante un Sevilla que, ante el talento ofensivo culé, encontró los momentos y espacios para hacer daño, le faltó suerte, la que le sobró en el gol a un Barcelona con un gran Yamal, un gran Fermín, un gran Joao Cancelo, pero que colectivamente, en defensa, esta temporada es una pesadilla en relación a la anteior. Le faltó punch final al Sevilla, que hasta pudo perderlo también por más en el cierre, con ocasiones seguidas de Ferrán y de Lewandowski, pero la defensa se revolvió como pudo y resolvió.
Al final, 1-0 para los culés, que vuelven a la cima con 20 puntos y pendientes de lo que hagan Girona (19) y Real Madrid (18), que se enfrentan este sábado a las 10:30 a.m. hora salvadoreña. Por hoy, el líder es Barcelona, que se va tranquilo, con los deberes hechos, a la Champions.