El 1 de noviembre de cada año se celebra el Día del Locutor en El Salvador por un decreto legislativo aprobado en 1987. En homenaje a esa fecha tan especial, el director de deportes de radio YSKL (104.1 FM), Carlos Amílcar Aranzamendi Recinos, una de las voces más reconocidas de la radiofonía nacional en el ámbito deportivo, contestó algunas interrogantes a CANCHA sobre el mágico mundo radial, que conoció desde pequeño como oyente. Desde hace más de 20 años, don Carlitos colecciona experiencias en cabinas de radio.
¿Qué significa la radio para usted?
Significa todo. Es el medio más rápido de comunicación en contacto con toda la comunidad. Es un instrumento que afortunadamente no esclaviza a absolutamente a nadie. Tú puedes moverte, estar en cualquier sitio y sintonizar la radio. Sigue siendo el medio predilecto.
¿En qué momento se enamoró de la radio?
Desde que nací. Primero, recordemos que en el país el medio radio siempre fue determinante. Claro, no había la cantidad de estaciones de radio que tenemos hoy. La radio siempre te generó imaginación. Saber, de repente, que estás escuchando en un aparato muchas voces. Nacía la inquietud de querer abrir el aparato, meternos y conocer a las personas que estaban hablando. Siempre la radio ha tenido ese nivel de imaginación. Uno puede escuchar una voz gruesa y es una persona delgada. Uno puede escuchar a una persona delgada y tiene voz gruesa. La radio siempre me inquietó y me gustó. Siempre estuvimos acompañados de un radio, ya sea de onda corta y escuchando estaciones de otros países. Nací a la par de la radio, me gustó la radio y estoy en la radio.
¿Recuerda cuál fue su primera experiencia en la radio?
Como radioescucha siempre llamábamos para solicitar canciones. Luego, recuerdo que cuando iba al estadio como aficionado al fútbol había unas maratónicas jornadas. Casi 25 estaciones de radio transmitiendo fútbol, algunas con menos personal y otras con más. De repente llegaban y nos entrevistaban. Allí comenzó mi relación con la gente del deporte y de los medios de comunicación. Recuerdo una invitación de Marco Antonio Azucena Velado y Ricardo Valencia, que me decían 'tienes un timbre agradable para la radio. ¿Te gustaría hacer radio?'. Respondí 'Claro que me gustaría, pero quiero estudiar primero periodismo'. Yo era estudiante de Bachillerato todavía cuando ellos me invitaron hasta que me convencieron. Mi prioridad para mí era graduarme de periodista, pero me decían 'en la radio vas a aprender a narrar, aparte de tener tus facultades y actitudes. Deberías aprovecharlo'. Fue así como allá por 1987 comenzó esta aventura que todavía continúa de manera interrumpida.
¿Cuál ha sido su recorrido en la radio?
Comencé en radio 10, que posteriormente se llamó Cadena de Oro. Pasé a la radio YSU. Estuve en radio Cuscatlán. De radio Cuscatlán volví a YSU por un momento nada más. A partir de 2003 creamos Monumental Deportiva y Deportes Monumental siempre en corporación YSKL. Desde entonces estamos acá. Después de 15 años me trasladaron para dirigir a Gol de KL cuando Raúl Beltrán Bonilla se fue a la Asamblea Legislativa como diputado del parlamento.
¿Cuáles han sido los cambios más significativos en el mundo de la radio?
En el mundo de la radio el primer cambio fue pasar de la frecuencia AM a la FM. Luego, el hecho de que la radio ingrese al internet y que este posteriormente en todas las plataformas y en todos dispositivos. Transmitiendo en Facebook, YouTube se amplificó el espectro y la penetración de la radio.
¿Cuál es el truco para convertirse en una voz tan reconocida en la industria del fútbol?
La constancia y la disciplina. Son aspectos muy importantes. Estamos en un rubro que apasiona a las grandes mayorías. Es una labor muy importante. El hecho de entretener, de divertir, de informar y de darle a la gente un contenido futbolístico nacional e internacional. Eso de alguna manera te conecta directamente con la gente que conoce. La gente sabe que hay horarios establecidos para escuchar programas estacionarios. Todo eso contribuye a estar en un contacto directo con la gente. Recibes llamadas telefónicas o te escriben a YouTube y al Facebook Live. Respondes y debatís con ellos.
¿Quiénes han sido sus referentes en el periodismo deportivo?
Aquí nacimos con la gente nacional. Recuerdo que incluso los partidos por televisión se transmitían muy pocos. De televisión recuerdo, porque tuve la dicha de conocerlo y luego reemplazarlo por su fallecimiento, a Mauricio Saade Torres. A nivel de radio tuve la dicha de trabajar a la par del considerado mejor narrador deportivo que ha tenido este país. Hugo Adiel Castro Maida, quien también ya falleció. Luego, hemos podido tener la oportunidad de estar cerca de otros profesionales del micrófono de la rama deportiva.
¿Cuáles han sido los tres momentos más especiales para usted en la radio?
Desde el momento que comencé a narrar un partido de fútbol y que hasta este momento todavía no lo he dejado de hacer. Otro momento importante fue el hecho de haber trabajado como corresponsal, de hecho lo sigo haciendo, para Fútbol de Primera, la radio que tiene los derechos de los Mundiales en Estados Unidos. Ellos me invitaron en el 2010 para estar en el Mundial de Sudáfrica. Estuve 45 días y 45 noches. Haber realizado Mundiales desde 1990 hasta la fecha a nivel de radio. Haber hecho partidos de Mundiales y grandes ligas en Canal 4. Me tocó narrar a partir de 1990 hasta 2004 que me retiré del canal. Cada momento ha sido muy especial. Es como cuando tú vas a transmitir determinado evento o competencia. Todo lo que hago para mí es especial. Estar día a día informando, entreteniendo a la gente para mí es todo prácticamente en mi vida porque estoy casado directamente con esta profesión.
¿Cuál es su estrategia, por ejemplo, para preparar las transmisiones radiales de un fin de semana?
Mi papel no solamente es el de narrar, informar, comentar y el de conducir las transmisiones deportivas, que casi siempre lo hago, sino que lo mío inicia desde el día a día con los programas estacionarios, el contenido, la edición, la preparación de programas como Actualidad Deportiva y Fuera de Línea. Luego, el hecho de producir los textos para los promocionales de los partidos que se transmiten, que son todos a través de radio YSKL. También organizar al personal. Hacer la distribución, enviarlos a los partidos que van a cubrir. Es decir, es un trabajo que va desde la parte administrativa hasta la de producción y la presentación de todos los materiales que elaboramos en conjunto con el equipo de trabajo.
¿Cuál es el secreto para contar con una amplia cartera de patrocinadores en el mundo de la radio?
Cada vez es más difícil porque el espectro creció muchísimo y porque con el correr de los tiempos, por alguna u otra razón, hay marcas que antes eran consideradas exclusivas en el mundo del deporte que ya no están. No es que hayan desaparecido, pero están en otras programaciones. Los clientes, en el caso de radio YSKL, aparte de contar con una radio que va a cumplir 70 años y que viene transmitiendo por más de cinco décadas, las transmisiones deportivas son parte fundamental del pilar que sostiene a la radio, así como el campo noticioso. Hay mucha variedad en cuánto a la producción de entretenimiento. La gente sabe que, por ejemplo, tiembla o hubo alguna tragedia sintonizan la YSKL porque es sinónimo de noticia. Lo mismo ocurre en el deporte. Nosotros hemos ampliado nuestra cobertura. Además del fútbol de la Primera División estamos con la selección nacional, la liga española y transmitimos algunos eventos regionales que cada vez es más difícil por los costos de transmisión. Entonces los clientes deben saber y lo saben perfectamente que si hay una primera opción en el campo de transmisión deportiva esa es YSKL. Desde allí ya existe una identificación, una conexión y una consciencia que realmente esta es la primera alternativa.
A usted la radio le ha permitido viajar y seguir de cerca a la Selecta en diversas partes del mundo. ¿Recuerda alguna anécdota especial?
Hoy menos que antes. Y explicó por qué. Explicó por el hecho que los costos de transmisión se han elevado. Antes tú comprabas los derechos de transmisión de los partidos exclusivamente de la selección nacional. Hoy tienes que comprar todos los eventos. Por ejemplo, Concacaf te vende todas sus competiciones que van desde los clubes. Un club salvadoreño puede jugar tres o cuatro partidos y luego tienes que comprar toda la competición. Y no es atractivo para los clientes ni mucho menos para los consumidores. Un partido entre equipos nicaragüenses y un partido entre panameños para citar dos casos en específico. Obviamente que el mundo del periodismo deportivo o la locución deportiva en este caso nos permite estar en eventos a los que muchas personas no pueden acceder y de forma gratuita. Tú puedes estar como observador, reportero o transmitiendo esos eventos. Eso es lo maravilloso para los que se están inclinando por esta rama de las comunicaciones o el periodismo deportivo. El deporte nos da esa ventaja y esa oportunidad de asistir a los eventos y verlos en primer plano, in situ, en el lugar de los protagonistas. Todas las giras han sido especiales. El primer reto es el hecho de que tengas una muy buena conexión, un buen sonido y que la gente esté satisfecha del servicio que le das. Para mí cada evento siempre es un reto. El primer reto es tener la nitidez en el sonido. Es primordial. La radio vende sonido y la gente con una señal defectuosa, les incomoda o termina apagando su radio o su equipo de sonido. Es el principal reto. En materia deportiva uno está viviendo cada evento porque cada uno tiene su connotación y su trascendencia. De repente una final de fútbol o un partido por el descenso. Son tantas emociones que se transmiten a través del deporte y especialmente del fútbol.
¿Qué consejo le daría a los jóvenes que les gustaría relatar partidos de fútbol?
Primero, lo de relatar aclaró que nadie te lo enseña. Lo de relatar creo y estoy convencido que es un arte y una habilidad que se puede desarrollar e ir perfeccionando. Hay muchas técnicas y trucos, pero lo primero es la disciplina. Segundo es la pasión y tercero el hecho de ser autocrítico, escucharse a uno mismo. Ponerse en el papel del consumidor y saber lo que a la gente le gusta. Hay que ser preciso y estar lo suficientemente informado y seguro de lo que uno está diciendo. Son tantas cualidades que debe reunir un relator. Y no siempre es mejor aquel que corre o que es más veloz, sino aquel que es preciso y que puede adornar las transmisiones con algunos datos que son enriquecedores a la hora de transmitir un evento o partido en específico.
Hace unos días el periodista argentino Andrés Cantor, quien usted conoce perfectamente, dijo las siguientes palabras: "hoy todo es entretenimiento deportivo. Los programas son más de discusión y entretenimiento. Cuando más gritas, más ratings tenés. Cuando más te peleas, más ratings tenés. El periodismo deportivo murió". ¿Coincide usted con las palabras de él?
Está muriendo esa esencia que uno escuchaba antes. Era impresionante escuchar a Macaya Márquez en las transmisiones del fútbol argentino. A Andrés Salcedo en el fútbol alemán. En El Salvador a Miguelito Álvarez, que tenía aquella capacidad de poner sobrenombres. La mayoría de apodos que tienen aquellas grandes figuras que brillaron en el fútbol salvadoreño o aquellas equipos que sobreviven o algunos que desaparecieron eran por la creatividad y la inventiva de los periodistas. Hoy el problema que más grande que apuntaba Andrés con mucha sabiduría es que los niveles de ratings son los que determinan en muchas partes del mundo la pauta. Aquí tuvimos un caso específico lamentable, pero tampoco se produjo ese efecto de retorno por el nivel de programa que estaban realizando cuando se inventó el Fuego Cruzado en Canal 21. Querer despotricar y destruir, por ejemplo, la industria futbolística. Atacando el técnico de la selección, a la Federación y a la Liga Mayor. Con eso querían conseguir ratings, una buena pauta y no se logró. No en todas partes eso cumple con el efecto ni con las expectativas que tienen los productores. Uno de repente ve un programa en una cadena estadounidense a un tipo que se sube en la mesa y comienza a gritar a su otro compañero. Claro que te va a llamar la atención y va a ser algo diferente, pero hasta donde construye y se cumple con la triple misión: la de informar, la de divertir y la de entretener. Esos son los tres aspectos que hay que cuidar siempre. Es la triple función de todo comunicador independientemente a qué rama se dedique.