Cristiano Ronaldo anotó ayer dos goles en el amistoso disputado en Aveiro entre Portugal e Irlanda, que acabó 3-0, un encuentro en el que el delantero de Madeira demostró, a sus 39 años, que tiene ganas de ofrecer su mejor versión en la Eurocopa de Alemania.
Era el último amistoso antes del primer partido de la Eurocopa que las ‘quinas’ jugarán el 18 de junio contra la República Checa y Cristiano era coreado por la afición cada vez que tocaba el esférico.
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En la primera mitad, Roberto Martínez probó en la parte ofensiva con el tridente formado por João Félix, Rafael Leão y CR7. Fue al 18’ cuando el jugador del Barcelona abrió el marcador tras una buena jugada de los lusos.
Tres minutos más tarde, en una falta, Ronaldo estrelló el balón en un poste y, ya en el añadido, Portugal pidió penalti por falta de un defensor irlandés sobre el delantero de Madeira.
En la primera parte, lo más destacado fueron las ganas de Cristiano y la buena movilidad de João Félix. Sin embargo, el centro del campo no acabó de funcionar, ya que João Neves apenas participó.
En la segunda mitad, Martínez probó arriba con Diogo Jota, dio descanso a Félix y Leão, y en la zaga sentó a Pepe y dio entrada al defensor del PSG Danilo, que se mostró muy seguro.
De nuevo, Portugal marcó el ritmo. El más combativo fue Bruno Fernandes, que lo intentó una y otra vez desde fuera del área, y Cristiano Ronaldo desató la locura en el estadio en los minutos 49 y 59 con sus dos goles, que supusieron el 3-0 definitivo.
El primer gol de CR7 recordó sus mejores tiempos en el Manchester United y el Real Madrid: un defensor esquivado con un regate seguido de un disparo teledirigido a la escuadra del palo largo del arquero irlandés. El segundo fue un disparo seco de nuevo con la zurda que confirmó que sigue siendo un finalizador temible a pesar de su marcha al club saudita Al-Nassr el pasado enero.
En otro amistoso de ayer, la selección de Ucrania cerró la fase de preparación para la Eurocopa con una contundente victoria (0-4) sobre Moldavia, en un encuentro con el que el delantero Artem Dovbyk volvió a mostrar el acierto que le coronó como máximo goleador de la Liga española. Dovbyk también contó con la ayuda de Lunin.