Y colorín, colorado. La pesadilla para los salvadoreños ha terminado… Águila cerró su participación en la Copa Centroamericana de la misma forma que lo hizo Jocoro y FAS: con una derrota. Los emplumados cayeron 3-0 contra Real España de Honduras, de visita.
Por lo menos, los emplumados tendrán el consuelo de decir que no fueron último en su grupo y que ganaron un partido.
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Pero en términos generales, no deja de ser un fracaso para el fútbol salvadoreño el hecho de que ningún equipo de la Primera División logró superar la fase de grupos.
Aunque lo de ayer fue puro tramite entre estos dos equipos, pues los catrachos tampoco tenían aspiraciones de nada.
En el caso de los emplumados, el técnico Carucha Corti continuó con las rotaciones, como lo hizo en el partido anterior frente al 11 Deportivo en la Liga local. De ese equipo, solo repitió Melvin Cartagena y Marcelo Díaz, quienes hicieron la doble contención.
Completaron el once titular: Benji Villalobos, quien volvió a jugar un partido oficial después de más de seis meses; Alexon Saravia, Sibrián, Carlos Pimienta, Romulo Villalobos, Dixon Rivas, Gerson Mayén, Brayan Paz y Divier Riasco.
El partido, los migueleños lo iniciaron bien, teniendo dominio de pelota y generando peligro con un tiro desviado de Gerson Mayén (10’) y otro de Villalobos que se estrelló en el larguero (30’).
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Pero poco a poco, los catrachos se fueron asentando mejor al campo, respaldados por un buen número de aficionados, muy bulliciosos para apoyar a su equipo.
Sin embargo, la clave del España estuvo en el banco, con el argentino Ramiro Rocca, quien hace algunos años militó en el Chalatenango, para anotar un “Hat-trick”, con tres remates de zurda, que vinieron de un centro por la banda izquierda, los dos primeros tras ganar linea de fondo (28 y 64’) y el otro, en profundidad (70’).
Águila ya no tuvo capacidad de reaccionar y estuvo más cerca de recibir el cuarto, que de descontar. Triste adiós.