Por Lamentablemente la improvisación que se vive en el área de salud nos vuelve a dar otra sorpresa: la formación del “Instituto Especializado El Salvador”, donde se persigue la formación de médicos especialistas.
Puede ser que la idea sea excelente; sin embargo, parece que se ha puesto la carreta delante de los bueyes, pues lo que necesita el ciudadano común es médicos en el primer nivel y bien preparados. Y con esta “nueva idea” no se soluciona el problema de la escasez de médicos generales en el país además de la evaluación del franco deterioro de la formación de médicos generales como una gran deuda en estos últimos años y mucho menos del personal de enfermería cuando, según los estándares, no tenemos ni el 50% cubierto de lo ideal de enfermería por 10.000 habitantes.
Todo lo anteriormente mencionado debe ser analizado por las autoridades de Salud, ya que por un lado tenemos a miles de médicos generales desempleados o ganando salarios que no son de acuerdo con la preparación y responsabilidad que tal puesto conlleva y una patronal que atenida a que el número de médicos se acrecienta cada año poco importa dignificar al gremio. Ahora resulta que el Hospital El Salvador será la cuna donde se prepararán a especialistas. ¿Y el rol de las universidades desaparecerá?
Y la nueva era de las especialidades médicas será ¿ responsabilidad del MINSAL y de forma gratuita? ¿ Dejará de ser la formación de especialistas la mano de obra barata que saca el trabajo de los hospitales?
Se le apuesta a cubrir segundo y el tercer niveles de atención médica cuando las necesidades reales están en la comunidad, en aquel lejano cantón y siempre he opinado que todo especialista que termina sus años de preparación realicen un servicio social, lo que ayudaría de gran manera a acercar las especialidades a la comunidad, sería algo que traería gran beneficio a la población de tener especialistas cerca parece una utopía; sin embargo, se puede hacer y tendríamos un sistema de salud ágil, cercano y que brinda una atención médica de calidad logrando con ello que el tiempo de las citas para que un especialista atienda a un paciente se reduzca considerablemente.
Además si se piensa formar especialistas en las instalaciones del actual Hospital El Salvador debe ser imperativo la gratuidad de entrar a la formación ya que deben ser las mejores notas con la mayor transparencia las que al ser elegidas serán los especialistas del mañana y que su única preocupación sea estudiar, ser el mejor especialista y no exista pago alguno ya que se aspira a un cargo público y por ende, no debe pagar. Sin embargo, no puedo dejar de pensar y preguntar ¿Qué será del Instituto de Salud Pública que hiberna en el mayor silencio?
No nos debemos llenar de institutos por aquí y por allá sino que deben ser las prioridades de un país las que deben ser paliadas y atendidas. No se trata de qué hacer con las instalaciones que hace apenas un par de años se pensaba en que sería el mejor hospital de América Latina y si revisamos lo que el país en el área de salud necesita, debemos respondernos que el déficit de enfermeras y médicos es enorme, teniendo una necesidad de contratar formar y preparar enfermeras que ayuden a ese dúo medico enfermera de tener al personal idóneo y en el número adecuado será el logro de la población.
Necesitamos más hospitales, más médicos generales recibiendo honorarios dignos. Llenar ese déficit de enfermeras que asciende casi a un 75 % y no querer inventar proyectos que poco impacto tendrán en la salud del pueblo salvadoreño. Más hospitales necesita el país y más especialistas en la red pública así como en todo el territorio nacional. ¿Las autoridades ya revisaron las largas listas de espera en las ya existentes agendas de hospitales?
Por allí se debe iniciar la planificación y dar esta noticia días después del terrible fracaso en la forma de pasar el ENAR2022, que más que satisfacción dejó frustración. Ojalá y las universidades ya tengan claro cuál será su rol en este futuro cercano con esta nueva idea del Instituto de Educación Médica Superior.
Médico.