Es como entrar a un museo de la fama. Como aquel de las glorias del fútbol mundial. Como esos en los que están figuras emblemáticas como Jorge “Mágico” González, el máximo ídolo del fútbol salvadoreño.
Esta vez, tocó el turno al portero Kevin Carabantes, actual jugador de CD FAS y quien está dando sus mejores años al equipo santaneco. El meta de origen chalateco se ha ganado a la afición, que le guarda respeto y ya lo colocó en el lugar de los grandes.
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Carabantes entró así a la “cuna de los futbolistas santanecos”, la Canchita El Tamarindo, en donde hay “un mural con distintos exjugadores de CD FAS que han marcado su huella en el club”, como informó el equipo tigrillo en sus redes.
“Carabantes es el jugador de la actual plantilla que está en el mural, tras obtener el campeonato Clausura 2021, después de una tanda de penaltis no apta para cardíacos”, complementaron.
En la pared de la cancha, quedó pitando Carabantes, con el uniforme de FAS y abrazando una copa. Cerca de su pintura, se lee “dos veces perfectos”, y está justo detrás de la portería del lugar. A la par de Kevin, está el dibujo de Alfredo Pacheco (QDDG), y lo sigue Alejandro Bentos.
El mural es especial para todos los que han hecho cosas importantes para la gloria del equipo. Y Carabantes lo sabe. También el guardameta dedicó un post, en sus cuentas personales, para agradecer este gesto. Un lujo.
“Tuve la oportunidad de poder visitar la Canchita El Tamarindo, cuna de muchos jugadores santanecos. Me llenó de mucho orgullo poder estar ahí”, escribió.ç
Quizás no lo merezco. Santa Ana ha sido cuna de grandes jugadores y grandes arqueros que han sido parte de la historia de FAS”, siguió.
Luego, cerró: “Sin embargo, agradezco a las personas que tomaron a bien incluirme en ese espacio. Lo valoro, lo aprecio y me compromete a seguir esforzándome y dando lo mejor de mí por este equipo que me ha dado mucho y lo cual estoy agradecido por darme la oportunidad de ser parte de su historia”.
Sin duda, un recuerdo que quedará enmarcado físicamente para el equipo. Y que quedará tatuado en los recuerdos y la historia deportiva personal de Carabantes.