Ángel Daniel Contreras y Jorge Andrés Gallegos Ramírez fueron enviados a prisión por el Juzgado 10° de Paz, mientras sigue el proceso en su contra, informó la oficina de Centros Judiciales a través de Facebook.
Ambos son procesados por los delitos de desaparición de personas y homicidio agravado.
Según las investigaciones preliminares, ambos imputados están involucrados en la desaparición y asesinato de Abdías Enoc Castillo Escobar, de 35 años.
El 6 de julio en la tarde, el cadáver de Abdías fue encontrado en un predio baldío, en el kilómetro 72.5 de la carretera Panamericana, a la altura del cantón San Francisco Chamoco, municipio de San Vicente, según reportes policiales.
De acuerdo con fuentes policiales, preliminarmente se estableció que Castillo Escobar fue estrangulado por sus asesinos después de robarle las tarjetas de crédito y débito, y obligarlo a entregar las claves.
Posteriormente los victimarios utilizaron el vehículo y las tarjetas de crédito para comprar en diferentes centros comerciales de San Salvador.
La última vez que la víctima fue visto con vida, fue el sábado 9, en compañía de tres sujetos con quienes había departido en una fiesta el día anterior.
Pero fue hasta el lunes 11 que sus familiares reportaron su desaparición ante las autoridades, ese mismo día, también fueron reportadas sus tarjetas de crédito al banco correspondiente.
Un día después que la familia reportó la desaparición de Castillo, uno de los sospechosos fue detenido cuando intentó obtener dinero de una de las tarjetas de crédito de la víctima.
Según fuentes cercanas a la investigación, las tarjetas ya habían sido bloqueadas.
Cuando Jorge Andrés Gallegos Ramírez intentó sacar dinero de un cajero en San Salvador y ya no pudo, fue a una agencia bancaria a preguntar qué pasaba con esa tarjeta.
A los pocos minutos, agentes se presentaron a la agencia, determinando además que el vehículo que conducía el sujeto también era propiedad de Castillo Escobar.
Allí mismo lo detuvieron y fue él quien reveló dónde habían abandonado el cadáver.
En la audiencia inicial, el juez consideró que hay indicios suficientes que demuestran la posible participación de los dos imputados en ambos delitos, por lo que ordenó que el caso pase a la siguiente etapa del proceso judicial.
Mientras tanto, los acusados permanecerán en prisión