Ya lo dijo Hugo Pérez, técnico de la Selecta, y lo reforzó Diego Henríquez, quien ha venido fungiendo como Director Deportivo de la Federación Salvadoreña de Fútbol. Ambos se encargan de entablar relaciones con los jugadores que son prospectos para vestir de azul y blanco.
En el caso de Brayan Gil Hurtado, ese trabajo está muy avanzado y solo es de esperar, tener paciencia y confiar en que el proyecto de Pérez sea lo suficientemente atractivo para Brayan, quien tendría la posibilidad de representar también a Colombia, y, lógicamente, está midiendo sus posibilidades.
“De nuestro lado, hicimos todo lo que había que hacer. Entregamos las cartas para FIFA, que tienen que llevar su firma que decide jugar por El Salvador y renuncia a Colombia. Hablamos con él, con el papá, y ya está del lado de ellos desde hace meses”, contó Henríquez a Cancha.
“Pero no forzamos las cosas, no podemos obligar a nadie a jugar. Sabemos que, si en algún momento él llegara a tener una oportunidad para Colombia, sabemos que podría ser importante para su carrera, entendemos esa parte”, se sinceró el Director Deportivo.
Sin embargo, desde la Selecta ofrecen paciencia, pero eso no significa un puesto asegurado. “En el momento que él quiera hacerlo, si nosotros lo consideramos que está en un nivel que pueda ayudarnos, lo vamos a tener. Todo buen jugador siempre va a ser bienvenido en la Selección. Sus hermanos están aprendiendo bastante bien en nuestra cultura y forma de trabajo, pudiste ver a Mayer (en la Sub20) y si él (Brayan) en algún momento lo hace, va a ser más que bienvenido”, contó.
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