Durante sus 15 años de existencia, Glasswing International ha movilizado a más de 138,643 personas voluntarias, quienes con su compromiso y entrega impulsan cada programa de la organización.
Para organizar el trabajo de los voluntarios, Glasswing tiene más de 500 profesionales de diversas áreas dentro de sus departamentos y programas; pero desde la figura de su presidenta, Celina de Sola, permea también esa mística de servicio y vocación en el resto del equipo, en cada proyecto y en cada país.
Por ello, para conocer un poco más de Celina de Sola fuera de su rol como presidenta de la directiva, El Diario de Hoy le preguntó por sus gustos y aficiones, algunos referentes y más (ver recuadros).
En todas sus respuestas, desde las personales hasta las que se relacionan con su labor social, Celina regresa siempre al orgullo que siente por su equipo, y destaca el compromiso de la red de voluntarios que acompaña todos sus esfuerzos.
“Entre los voluntarios están docentes de la misma escuela, padres, madres, estudiantes, alumnos universitarios, voluntarios corporativos. Y hay clubes que varían, como club de debate, de liderezago, de basket, de fútbol, de arte, de robótica”, describe.
Como una de las principales piezas a cargo de la fundación, Celina trabaja junto a John Moore (chair de la junta directiva), Ken Baker (cofundador y CEO) y Diego de Sola (cofundador y miembro de la junta directiva).
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A juicio de Celina, la clave en Glasswing es potenciar al voluntariado en todo el territorio y en los diversos programas, ya que “es un generador de valor social y económico tan grande, que creo que es un reto que estamos dispuestos a seguir asumiendo en la organización, el movilizar a más gente, para que vean el potencial de cambio que tienen ellos como individuos, de incidir, con esa participación cívica a través de un voluntariado”.
En cuanto a las personas que integran Glasswing como organización, la directora describe con satisfacción que “el equipo es bien diverso y eso lo hace fuerte. En El Salvador hemos crecido un montón y tenemos muy poca rotación. El equipo va creciendo pero no tenemos tanto cambio, vas consolidando una cultura de trabajo que es importante, que se pasa a los proyectos que hacés”.
Gustos, aficiones y referentes
Admiradora de star wars
Celina se confiesa seguidora de la saga de La Guerra de las Galaxias. En la actualidad, acaba de terminar de ver todos los capítulos de la reciente serie The Mandalorian. Antes de eso, también vio El Libro de Bobba Fett, pero comentó que no le gustó demasiado... hasta que justamente apareció el personaje del mandaloriano. A Celina le encanta tanto el mundo de los sables de luz y los destructores estelares que incluso ha visitado ferias como la Comic Con. Está atenta a cada capítulo de Obi Wan Kenobi, la última entrega de la saga, estelarizada por Ewan McGregor.
Dos de sus libros favoritos
En temas literarios, Celina destaca primero en gus gustos la obra “El Principito”, del exaviador y escritor francés Antoine de Saint-Exupéry. De inmediato aclara que le gusta ese libro y no “El Príncipe”, de Maquiavelo.
“Otro libro que me parece espectacular y es uno de mis preferidos, es ‘Man’s Search of Meaning’ (El Hombre en Busca de Sentido), de Víctor Frankl”, agrega la presidenta de Glasswing. Frankl, austriaco, sobrevivió en campos de concentración nazi entre 1942 y 1945, fue psiquiatra, neurólogo y filósofo.
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De Robin Williams a los Bee Gees
Confiesa que últimamente se ha decantado por disfrutar películas y series del género comedia. Uno de sus favoritos de siempre ha sido Steve Martin (“Más barato por docena”, “El padre de la novia”, La Pantera Rosa”, etc.), , pero quien entra en su categoría de preferidos es Robin Williams (“Patch Adams”, “El Club de los Poetas Muertos”, etc.). Si hablamos de música, Celina gusta de escuchar rock clásico y disco, “como de los setenta, música de bailar, tipo funk y disco. Me gusta la música de los Bee Gees, de los Jackson Five”, comenta.
Actividad deportiva, sin fanatismos
“Practiqué un montón de deportes; últimamente he estado jugando a veces un poco de squash, que me gusta bastante”, responde, al consultarle qué deporte está practicando en la actualidad. Además de estar activa en esta disciplina de pelota y raqueta, Celina explica que si le dan a escoger un deporte para observar como aficionada, le gusta ver un buen partido de fútbol, pero aclara que “no soy fanática de un equipo en particular. Me gusta ver diferentes partidos de distintas partes del mundo, no soy de solo Barcelona o solo Real Madrid ni nada así”.
Se tomaría un café con…
¿A quién elegiría Celina de Sola para tener una plática de toda una tarde, si pudiera elegir entre todos los personajes de la actualidad? Después de pensarlo un poco, respondió que elegiría al Dalai Lama. ¿Y a quién escogería como personaje histórico? Contestó que “me hubiera encantado conocer a mi padrino, Carlos de Sola. No es personaje famoso; él murió cuando yo tenía dos años, le decían ‘Mamuco’; estuvo bien involucrado en temas de cultura y educación. Y también me encantaría tomarme un café con Martin Luther King Jr.”, activista por los derechos civiles.
Cariño especial al club de debate
Este programa fue iniciado por Glasswing con el apoyo de El Diario de Hoy, y Celina le tiene un aprecio especial: “si hablás con chicos y chicas que han participado, desarrollan competencias súper importantes, de pensamiento crítico, de liderazgo, de comunicación. Desarrollás habilidades y competencias que usás también en el mundo laboral. Muchos alumnos que participaron en los clubs de debates han continuado con sus estudios, participaron en temas de leyes, de empoderamiento de la mujer, de derechos, etc.”, explicó con satisfacción.
Autodescripción en tres palabras
El Diario de Hoy le pidió a la presidenta de Glasswing que se definiera en tres palabras, y eligió las siguientes: “Determinada, audaz y auténtica”. Este último lo relacionó directamente con su labor al frente de esta oenegé internacional, ya que “soy una persona espontánea, soy quien soy, genuina, y eso ha ayudado en mi trabajo: no sentís que te voy a cambiar las cosas después que uno habla. Es esa integridad de mantenerte”, en un acto constante de credibilidad que ha sido clave para que Glasswing International haya llegado a 15 años de existencia.