Frank Velásquez, uno de los líderes de la Selección de Fútbol Playa varonil, celebró con alivio la conquista de la Copa El Salvador de esta modalidad, el pasado sábado, tras una sufrida remontada ante México (3-2) y luego de varios años de sequía en este torneo de exhibición organizado en el país.
"Varias veces México había venido a ganar este título aquí en casa. Es una de las selecciones más viejas de la zona, la más ganadora y siempre se nos va a complicar, al igual que Estados Unidos, con las que somos potencia en Concacaf. Pero sabíamos que en casa teníamos que asegurar”, aseguró Velásquez, en zona mixta tras los actos de premiación.
El pívot histórico, balón de bronce en el Mundial de Rávena 2011, no se quedó sin reconocer el esfuerzo que él y sus compañeros han puesto en la preparación de este evento. “A veces toca madrugar en los entrenos, pero así son los sacrificios que uno hace y ahí está la recompensa… Ser el número uno de Concacaf no es fácil porque hay que competir con México y Estados Unidos. En la zona hay que trabajar fuerte para estar entre las mejores selecciones del mundo”, resaltó.
Además, entre los logros de la Selección en este torneo, Velásquez destacó la aparición de nuevos talentos y la ganancia de experiencia para estos, algo que aseguró pesó en anteriores citas. “En el Mundial hubo debutantes y eso nos pasó factura”, recordó.
“La Liga (Nacional de Fútbol Playa) también nos ha ayudado, porque han debutado el goleador, (Emerson) Cerna, que ha hecho un buen torneo, y mi sobrino César (Rivera), que a través de los trabajos que se han hecho en la Barra de Santiago ha dado un fruto para la Selección… Creo que este tipo de eventos es bueno que lo hagan en el país, porque tenemos muchos jugadores jóvenes con futuro, y esto sirve para que vayan agarrando fuerza y experiencia”, explicó.