En la economía, el 2024 fue para El Salvador un año de muchas alzas: en el gasto público, en la deuda, en el déficit fiscal y en el precio de la comida. Pero también de caídas: en el ritmo del crecimiento, en la Inversión Extranjera Directa y en las exportaciones.
Las subidas
En junio y julio se registraron dos récords consecutivos en los precios de la canasta básica empujados, sobre todo, por un alza desmedida en el costo de frutas y verduras.
Suscríbete para seguir leyendo
Obtén acceso a todo nuestro contenido exclusivo.Continuar leyendoYa soy suscriptor
La razón principal fue una lluvia que provocó dificultades en las cadenas de distribución. También mucha especulación: algunas verduras, como los pipianes, triplicaron su precio en apenas 12 días, entre el 14 y el 26 de junio.
Representó una verdadera crisis para la administración de Nayib Bukele: el presidente de la República tuvo que dar la cara en una conferencia de prensa en la que admitió la baja producción agropecuaria del país; pero achacó el aumento de los precios exclusivamente a la voluntad de los comerciantes.
LEA MÁS: Los gastos superan los ingresos en $463 millones hasta octubre
Los amenazó con procesarlos por delitos distintos a la subida en los costos, lo que fue catalogado por expertos como chantaje a la inversión.
Pero el desmedido aumento de los precios no fue un fenómeno puntual, según Danilo Pérez, del Centro para la Defensa del Consumidor (CDC). Fue la culminación de un proceso iniciado, al menos, desde octubre de 2021, cuando la inflación de los alimentos comenzó a superar a la general. La tendencia duró tres años enteros y no se quebró sino hasta octubre de 2024.
Por otro lado, el gasto público alcanzó al menos hasta octubre los $7,976.1 millones. Los ingresos tributarios también tuvieron un alza, llegando hasta los $6,797.6 millones, $500 millones más que la cifra conseguida en 2023. A pesar de ello, debido a la excesiva cantidad de salidas, el déficit fiscal fue de $463 millones, $180 millones más que en el mismo periodo del año precedente.
Por causa de esto, la deuda pública total también tuvo un aumento importante. Si no se toma en cuenta la deuda con el Fondo de Pensiones es posible observar que el saldo a octubre subió en $1,049 millones con respecto al mismo mes de 2023, unos $87 millones cada 30 días.
Pero el alza es todavía más alarmante si se toma en cuenta el compromiso con el dinero de todos los trabajadores: $2,155.28 millones entre octubre de 2023 y octubre de 2024, un promedio de casi $180 millones mensuales.
"No puede seguir creciendo la deuda a ese ritmo. El problema que agrava la situación es que no hay claridad para dónde va ese dinero", dice el economista Otto Rodríguez.
La situación de la deuda es una preocupación constante para el Gobierno central, de allí que haya emprendido hasta tres operaciones de recompra de bonos, dos de las cuales se hicieron con emisiones a altas tasas de interés: 12 % (la de abril) y 9.65% (la de noviembre). Solo en una de ellas logró un ahorro, pero para esta tuvo que contar con el aval del banco de Desarrollo de Estados Unidos.
PUEDE LEER: Mujeres empujan el envío de remesas a El Salvador, destaca estudio
Las maltrechas finanzas habrían llevado a que la Administración Bukele decidiera dar su brazo a torcer y concediera al Fondo Monetario Internacional (FMI) sus exigencias en las reformas a la Ley Bitcoin. A cambio, el organismo le entregará $1,400 millones a una baja tasa de interés. También deberá hacer muchos más cambios para lograr un ajuste fiscal: gastos menores a sus ingresos.
"Sobre El Salvador dicen que va bien, pero yo lo que veo es hambre. Su pobreza ha aumentado. No tienen inversión, no tienen crecimiento económico. ¿Qué queda? Comer menos, gastar menos", dijo para El Diario de Hoy Miguel Gutiérrez, de la Fundación Economía para el Desarrollo.
Las bajadas
El crecimiento económico será mucho menor al vaticinado por el Banco Central de Reserva (BCR), del 4 %. Al menos eso es lo que se puede inferir del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de los tres primeros trimestres de 2024. Tampoco se alcanzará el 3 % calculado por el FMI.
Tras un prometedor 3.45 % en el primer trimestre, el crecimiento se ralentizó en los dos siguientes, 1.58 % y 1.53 %. Para lograr el 4 % calculado por el BCR, por lo tanto, se debería tener un crecimiento económico del 9.44 % en el último trimestre. Para según el más conservador pronóstico del FMI esta alza debería ser del 5.44 %. De allí que economistas como Rommel Rodríguez, de FUNDE, sostengan que, mas bien, el crecimiento será del 2.6 %.
Otro indicador que bajó fue el de la Inversión Extranjera Directa (IED), al menos en los tres trimestres para los que hay información. En los primeros nueve meses del 2024, el total fue de $387 millones, $145 millones menos que en el mismo periodo de 2023. Esto es porque este año el segundo trimestre presentó un saldo negativo de $33.6 millones, es decir, que salió esa cantidad de capitales del país.
Las exportaciones (el otro gran método para traer divisas al país) también cayeron en 2024. Hasta noviembre, se reportaron $5,997.9 millones, un 0.8 % menos que en 2023.