Con un público entregado a su número 1 del mundo, Chelo Arévalo deleitó con su mejor versión a la afición salvadoreña. Y cerró así el evento Open ESA "Leyendas en la Cancha 2024" este domingo, junto con el croata Mate Pavic, el neerlandés Jean-Julien Rojer y el mexicano Miguel Reyes-Varela.
Fue la segunda jornada de un fin de semana que permitió al país tener, en el Gimnasio Nacional "Adolfo Pineda", a cuatro tenistas de lujo mundial. Algo histórico que solo sirvió para reafirmar en qué nivel está jugando el nacional.
Chelo Arévalo, el 1 del mundo, regaló una noche histórica a El Salvador
En este partido, Chelo hizo dupla con Rojer, con quien jugó en el pasado y con el que ganó su primer Roland Garros. Demostraron que siguen teniendo buena dinámica y que lo que jugaron durante dos años juntos no fue casualidad. Todavía se entienden y conservan el saque fino, la complicidad en las devoluciones, y responden igual a los rechazos pegados a la red.
Tanto como el primer día junto a Pavic, su actual pareja, Arévalo ganó para su gente. Local y europeo se impusieron por 6-4, 6-7(5) y 10-4.
No faltó, la intensidad de apoyo de la gente. Ese aplauso que incluso Chelo pedía a la grada, alzando los brazos, motivando a que lo gritaran y que se hiciera sentir lo que es jugar en casa. Así lo vivió la raqueta número uno para su tierra, para su bandera. Lo disfrutó. Con un gracias final por el siempre apoyo de la gente.
Al igual que el primer día (dobles mixtos), hubo otra exhibición de tenis juvenil nacional. Se disputó un juego de singles, entre César Cruz y Juan Carlos Fuentes. Los tenistas forman parte del equipo de Copa Davis, junto con Arévalo.
El encuentro terminó a favor de Cruz 2-0, tras un doble tie-break, por 5-4(3) y 5-4(4). También demostró que está un paso adelante como raqueta juvenil azul y blanco.
Como parte de romper el protocolo, también la Federación de Tenis (FST) realizó previo un compartir con 60 atletas ganadores del ranking nacional y los cuatro grandes tenistas, con quienes se fotografiaron. Chelo, además, recibió la "Raqueta de Oro", de parte de su hermano Rafael (presidente de la Federación), por ser el 1 del mundo.