El Tribunal Quinto Contra el Crimen Organizado de San Salvador decretó sobreseimiento provisional para Paolo Alessandro Ruano Romero y Gerardo Antonio Romero, dos hermanos que fueron capturados el pasado 29 de octubre en la Terminal del Sur, en San Marcos, en el contexto del cerco militar impuesto por el gobierno por la supuesta presencia de pandilleros activos en la colonia 10 de octubre, cerca de la estación de autobuses.
En la audiencia de imposición de medidas realizada el 13 de noviembre, el Tribunal resolvió a favor de los hermanos capturados gracias a los indicios probatorios que fue presentado por la defensa entre las cuales figuran: constancias de trabajo, constancias de estudios de cada hermano, contrato de trabajo del equipo de segunda división donde figura Paolo, los cuales comprobaron el ritmo de vida que tenían los capturados, según informaron fuentes judiciales a El Diario de Hoy.
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Los hermanos fueron trasladados hacia el Centro Penitenciario de Izalco el 6 de noviembre, luego de estar recluidos en las bartolinas conocidas como “El Penalito” en San Salvador.
Sus familiares temen que su liberación no se haga efectiva por el historial público que existe de personas capturadas de forma arbitraria que tienen su orden de libertad ordenada por un juez y estas no se han ejecutado.
Claudia Romero, madre de los hermanos, pide la pronta liberación de sus hijos antes de que se desconozca si los trasladan de centro penal. Actualmente, ni la abogada defensora ni los padres saben en qué fase se encuentran.
Paolo y Gerardo se dedicaban a ser “bordoneros” en la Terminal del Sur, ofrecían viajes de taxis a las personas que transbordan en los autobuses. En el caso de Paolo Ruano, también era futbolista profesional del equipo Atlas F.C. de la Segunda División del país.
Los hermanos fueron capturados por elementos de una unidad especializada de la Policía Nacional Civil la mañana del 29 de octubre mientras trabajaban en dicha terminal de San Marcos.