Doce años han pasado desde la traumática experiencia a la que fueron sometidas Laura Zapata y Ernestina Sodi, tras ser víctimas de secuestro. Este suceso marcaría el distanciamiento familiar, por los hechos posteriores a su liberación.
El hecho que ocurrió en 2002, ha vuelto a causar revuelo tras el lamentable deceso de Ernestina, a causa de un infarto lo que provocó que se rompiera la arteria aorta que causó el segundo infarto.
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Las hermanas mayores de Thalía fueron privadas de libertad a la salida de la obra de teatro “La casa de Bernarda Alba”, en la que Zapata estaba actuando.
“Empezamos a ver una camioneta con un coche como que se están peleando y de repente vemos que de la camioneta baja un cuate con armas largas y le digo: ‘Wow, traen armas largas y vienen hacia nosotras’. Con la culata del arma rompe mi vidrio, yo me quité un anillo de brillantes y me lo metí en el busto, abrí la puerta y dije: ‘Que se lleven el coche’”, relató Laura.
Por su parte, Sodi narra su testimonio en su libro “Líbranos del mal”: “Me meten en la cajuela (maletero) de un coche, amarrada de pies y manos. Lo primero que siento es que me falta el aire y después, cuando me ponen la colcha encima comienzo a volverme loca. Es la sensación más terrible que he experimentado. En la oscuridad de la cajuela pienso que me van a matar”, se lee en un extracto de su libro.
“Líbranos del mal” estuvo acompañado de una fuerte polémica pues habría sido lo que fragmentó la relación entre Sodi, Thalía y Laura, a quien se le señala en la publicación como la autora intelectual del secuestro.
Cabe mencionar que el relato escrito de Ernestina contrasta con el hecho de que también expone que secuestradores, a quienes identifica como “la banda de los tiras” no “tenían nada personal con ellas”, sino que, querían el dinero de Tommy Mottola, esposo de su hermana Thalía.
“Los tiras” exigían 5 millones de dólares que debía pagar el esposo de Thalía, Tommy Mottola.
La agonía del secuestro duró 40 días, en los que Sodi fue abusada sexualmente, según menciona en su libro.
Por su parte Zapata, luego de su liberación, montó la obra de teatro “cautivas”, con la cual dio su versión del secuestro.