El equipo nacional que dirige David Dóniga está a punto de conseguir el segundo gran objetivo por el que se le trajo. El primero era parar la terrible racha de malos resultados, fueron 23 los duelos en los que no se ganó, incluidos varios en los que él dirigió.
Se terminó la mala seguidilla (hace unos meses pero por eliminatorias) precisamente contra el rival al que se le ganó - apenas - el jueves, el mismo con el que se mide hoy en Liga de Naciones, San Vicente y las Granadinas.
No le ha gustado mucho a la afición las formas, ni al periodismo en general, echando la culpa al entrenador David Dóniga, y en un fútbol donde algunos equipos de Primera, sí de Primera (en Segunda y Tercera son peores las cosas) no le pagan ni a sus jugadores... fue un 2-3 sufrido el de la Selecta contra San Vicente, e incluso se vio dominado por momentos el conjunto nacional, pero, al final, ligó su tercera victoria consecutiva.
Eso no ocurría nada menos que desde 2021, y cuando uno busca en el registro histórico situaciones similares positivas, es a cuentagotas que se encuentra, siempre con caribeños involucrados. Así que ese invento que "la Selecta de todas es la mamá" no es más que una bonita canción que suena bien pero que no tiene nada de verdad, salvo en registros contra Belice. Nunca, ni siquiera en la época de las mejores selecciones nacionales, El Salvador sacó grandes ventajas a los Centroamericanos, sí a los caribeños, hay que reconocerlo, pero a los de segunda línea, mismos que han venido trabajando fuerte en los últimos años, en algunos casos, y que han encontrado en ligas europeas más empleo que los nuestros.
Las distancias no se han acortado, de hecho, desde ese punto de vista, para muchos profesionales del área caribeña, la realidad es que ya superan a muchos centroamericanos. Surinam, Haití, Jamaica, y hasta Trinidad han tenido muchos más jugadores militando en Europa (claro, la gran mayoría fuera de las grandes ligas) en los últimos años. El Salvador apenas cuenta con un puñado afuera, en el viejo continente, y se cuentan con una mano, ninguno está convocado para mañana.
El equipo de Dóniga, basado en la Primera División con algunos legionarios más, mal que bien, está cumpliendo. Va invicto en esta Liga de Naciones con 3 triunfos, y hoy podría sellar el ascenso a Liga A con una nueva victoria, y también, de paso, certificar el el boleto a Copa Oro, un doblete enorme... tomando en cuenta que la Selecta pasó, como se mencionó, 23 juegos sin ganarle a nadie, ni siquiera a Bonaire que, en palabras del "caló popular", no existe.
Para el encuentro de hoy, el entrenador se verá obligado a cambiar su esquema al menos en un nombre, pues el delantero Steven Vásquez, autor del primer tanto el jueves, se lesionó el tobillo y estará unas tres semanas de baja. Todo apunta a que, tras el gol de la victoria que consiguió, será Francis Castillo el que tome su lugar para jugar en punta, un poco por delante de Rafa Tejada.
La otra variante, al menos que se rumora, es que Tomás Romero saldrá a la portería. Los ha rotado últimamente Dóniga con Mario González, pero es que, además, ante San Vicente no fue el mejor encuentro del albo, y el rival supo explotar las carencias aéreas nacionales, justo ahí donde Romero le saca ventaja a Mario.
Después, podría haber otras modificaciones en orden de recuperación, aunque Santos Ortiz, que entró de cambio y fue clave (marcó el segundo gol), también "pide" ser titular, en un encuentro en el que el tema físico será factor ante los caribeños, una vez más.
Estos volverán a apostar a la fuerza, a la ventaja en el juego aéreo, ahí donde el equipo de Dóniga realmente presenta las mayores carencias ante rivales B del Caribe, y ni hablar ante rivales A de Concacaf. Ahí, en la defensa, ha sufrido, pero ha logrado sortear lo que no ocurría antes, y es que mete goles. Un dato quizás pasado por alto. Lleva 9 tantos en 3 juegos de Liga de Naciones, pero ha recibido 4. Y eso que no está Emerson Mauricio (lesión) ni Jonathan Esquivel (no ha sido llamado por Dóniga, ni Brayan Gil (lesionado oficialmente, pero con aparentes diferencias con Dóniga). Hoy, aunque no le guste a la afición y al periodismo, la Selecta puede ya cumplir dos objetivos más que le refuercen la confianza para lo que viene más adelante, que será mucho más duro que San Vicente. ¿Podrá Dóniga y el equipo? El tiempo lo dirá.
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