La Organización de Naciones Unidas (ONU) ha pedido al gobierno de Nayib Bukele información y explicaciones sobre la detención, desaparición forzada, posible tortura, y muerte de su propio Asesor de Seguridad Nacional, Jorge Alejandro Muyshondt Álvarez, la cual debería entregar a más tardar este 11 de septiembre.
El Relator Especial sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias; del Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria y del Grupo de Trabajo sobre las Desapariciones Forzadas o Involuntarias, envió el pasado 11 de julio, un documento de 10 páginas en las que expone la información que ha recibido sobre el caso Muyshondt, desde su captura, el 9 de agosto de 2023, hasta su muerte, el 7 de febrero de 2024.
El Diario de Hoy solicitó ante el Secretario de Prensa de la Presidencia de la República, Ernesto Sanabria, la posición de Casa Presidencial sobre este tema, sin embargo, no hubo respuesta.
Entre la información solicitada por el relator especial están las bases legales para el arresto y detención de Muyshondt, así como las razones por las cuales la familia del desaparecido funcionario no fue informada de manera oficial tanto de la detención como de procesos legales y lugar de detención.
La información en poder de la ONU indica que Muyshondt fue capturado a las 12:30 del 9 de agosto de 2023 en la ciudad de Santa Tecla. Los pocos detalles sobre la detención son los que Bukele publicó en sus redes sociales en la que señaló que “Las investigaciones, el Organismo de Inteligencia del Estado, descubrió que el Señor Muyshondt actuaba como un doble agente desde el año 2019, habría trabajado para el expresidente Mauricio Funes, y que, dentro de esas operaciones, ambos filtraban documentos clasificados a periodistas, además de a un gobierno extranjero y a varios ciudadanos de otros países”.
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“Acusó a su vez al Señor Muyshondt de ayudar al expresidente Funes a evadir la justicia y no ser capturado, alegando que un informante del expresidente Funes, habría avisado al Señor Muyshondt de la investigación, por lo que este último decidió filtrar pruebas que acusaban a un diputado. Sin embargo, desde el 27 de julio de 2023, el Señor Muyshondt publicó en su cuenta de X/Twitter acusaciones con pruebas en audio y fotografía acerca de los delitos presuntamente cometidos por el diputado del partido de gobierno Nuevas Ideas”, se afirma en el documento.
En sus promesas de campaña para su primer período como presidente de El Salvador, Bukele prometió traer a Funes desde Nicaragua para que respondiera por diversos delitos que ha sido procesado, entre ellos, desfalcar más de 300 millones de dólares de las arcas del Estado.
La ONU también solicitó a Bukele que informe sobre la reclusión bajo régimen de incomunicación y de las medidas que el Estado adoptó para garantizarle un juicio justo y un debido proceso.
“Sírvase proporcionar información acerca de la reclusión del Señor Muyshondt en régimen de incomunicación, así como las medidas adoptadas para garantizar su derecho a ser tratados con dignidad, a tener acceso a sus abogados y a visitas de sus familias, y garantías de juicio justo y debido proceso”, indica en el numeral 4 de las peticiones.
Familiares de Muyshondt han alegado que, a partir del momento de la detención, y hasta su muerte no se les permitió comunicarse con él, se les negó verlo y saber el lugar donde lo tenían detenido.
Lo único que sabía la familia del ex asesor de seguridad era lo que publicaban los medios de comunicación y un par de datos que les dieron en la Procuraduría General de la República (PGR) donde les dijeron que le habían asignado tres abogados (pagados por el Estado), pues tenía tres procesos judiciales abiertos, uno de los cuales era por el delito de extorsión, y que tampoco a ellos se les había permitido ver a Muyshondt.
No le dejaron llevar ni medicinas
Debido al proceso por el delito de extorsión le estaban aplicando el régimen de excepción; ello implicaba que no podían verlo ni tener contacto con él. Cuando un familiar intentó hacerle llegar ropa, medicina y artículos de higiene personal, le dijeron que no se le permitiría por “órdenes superiores”.
La familia de Muyshondt recibió un duro golpe luego de que El Diario de Hoy informara, el 16 de octubre de 2023, que había sufrido un accidente cerebrovascular isquémico que lo había dejado sin habla y sin movilidad parcial, que lo tenían en el Hospital Saldaña con un diagnóstico muy grave.
A raíz de lo anterior, el 25 de octubre de 2023, la madre de Muyshondt, Patricia Álvarez, interpuso un habeas corpus a favor de su hijo, ante la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia. El documento de la ONU indica que al día que murió, el recurso no fue respondido.
"En este sentido, se recuerda que una privación de libertad, seguida del ocultamiento de la suerte o el paradero de la persona desaparecida, sustrayéndola a la protección de la ley, cualquiera sea la duración de dicha privación de libertad u ocultamiento constituye una desaparición forzada."
solicitud de información del caso Muyshondt por parte de la onu a bukele
Semanas después, Álvarez solicitó al tribunal que llevaba el caso de su hijo: “1) Se le informe en qué lugar se encuentra guardando detención su hijo. 2) Solicita que se ordene la práctica de reconocimiento médico de salud física, psicológica y psiquiátrica, a fin de verificar su condición de salud. 3) Saber si está siendo sometido a algún tipo de tratamiento médico, si se le está suministrando medicamentos y si se ha programado citas médicas en algún nosocomio”, pero el 4 de diciembre de ese mismo año, fue informada que el tribunal había declarado “no ha lugar”, las peticiones de la madre de Muyshondt.
Sobre lo anterior, la ONU le ha pedido a Bukele: “Sírvase proporcionar información sobre la denegación del habeas corpus y de las solicitudes de información por parte de los familiares del Señor Muyshondt ante los tribunales”.
En el documento, la ONU le pide al gobierno salvadoreño “...proporcionar información detallada acerca de las investigaciones judiciales y administrativas iniciadas con relación a este caso según estándares internacionales, en particular según el Manual de las Naciones Unidas sobre la Prevención e Investigación Eficaces de las Ejecuciones Extralegales, Arbitrarias o Sumarias, mejor conocido como Protocolo de Minnesota sobre la Investigación de Muertes Potencialmente Ilícitas”.
Muchas contradicciones
“Expresamos nuestra seria preocupación por el hecho que el Señor Muyshondt Álvarez presuntamente permaneció desaparecido durante seis meses, durante los cuales sus familiares y sus representantes legales no habrían recibido información oficial sobre su situación fuera de las noticias recibidas a través de los medios de comunicación”, indica la solicitud.
Según el documento de la ONU, sobre la muerte de Muyshondt hay dos versiones. En un documento del Instituto de Medicina Legal se consignó que murió a consecuencia de un edema pulmonar (acumulación de líquidos en los pulmones), en tanto que en una acta médica entregada por la Fiscalía se indica que murió “por fallo multiorgánico, shock distributivo, accidente cerebrovascular, hipertensión arterial, neoplasia gástrica y metástasis”.
Por último, la ONU le exige a Bukele “garantizar el derecho a la información de las familias de las personas privadas de libertad y el derecho a visitar a sus seres queridos, además de las medidas adoptadas para garantizar que las familias reciban informes médicos y autopsias precisas”.
“Quisiéramos recordarle al Gobierno de su Excelencia que en todo caso de muerte en custodia existe una presunción de responsabilidad del Estado, por lo cual el derecho internacional exige se lleve a cabo una investigación exhaustiva, rápida, independiente e imparcial de todos los presuntos casos de ejecuciones extralegales, arbitrarias y sumarias”, detalla.
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En El Salvador, según registros de organizaciones defensoras de derechos humanos, han muerto más de 300 personas que habían sido detenidas arbitrariamente bajo el régimen de excepción y que desde el momento de su arresto nunca volvieron a saber de ellas hasta que fueron avisadas, muchas veces por empleados de funerarias, que habían muerto.