El Juzgado de menores de Usulután aún no ha programado la audiencia de imposición de medidas contras los estudiantes capturados en la colonia La Cruzadilla de San Juan, jurisdicción de Jiquilisco, pese a que originalmente solo le había otorgado un mes a la Fiscalía para realizar la investigación, aseguran las madres y padres de familia.
La decisión del juzgado de otorgar sólo un mes fue apelada por la Fiscalía ante la Cámara de Menores y solicitó un plazo de seis meses. Hasta ahora los familiares de los capturados desconocen cuál fue la resolución de la Cámara al respecto.
Los familiares relataron que están desesperados porque aún no les han notificado la fecha para la segunda audiencia, debido a que Medicina Legal no ha entregado unos informes.
Una de las madres de familia explicó que personal de Medicina Legal llegó a la colonia a hacer entrevistas a los residentes para indagar sobre la conducta de los adolescentes y que además les hicieron unos exámenes corporales a los capturados.
“Estamos desesperadas porque ya pasó mucho tiempo y hasta ahora no han dicho la fecha de la segunda audiencia, lo único que sabemos es que Medicina Legal no ha entregado los informes sobre la investigación”, dijo una de las señoras.
Los estudiantes fueron capturados el 12 de abril y son acusados por la Policía de intentar formar una clica de la Mara Salvatrucha y hacer unos grafitis alusivos a esa pandilla.
Las madres de adolescentes han negado las acusaciones y junto al Comité de Familiares de Víctimas del Régimen del Bajo Lempa denunciaron en marzo una serie de irregularidades en el caso.
Una de las primeras irregularidades denunciadas fue que la Fiscalía basó su acusación en un testimonio policial falso, el cual indica que los menores de edad fueron detenidos la noche del 11 de abril, pasadas las 10 de la noche, cuando salían de hacer los grafitis dentro de la escuela.
Sin embargo, madres, padres y residentes de la Cruzadilla narraron que los adolescentes fueron sacados uno por uno de sus viviendas por soldados y policías en el transcurso de las 9 de la mañana a las 12 del mediodía.
Señalaron que dos días antes de realizar las detenciones, varios agentes llegaron al centro escolar y tomaron el nombre de todos los alumnos mayores de 12 años.
Aunque son menores de edad, los familiares aseguran que no fueron informados de esa actividad por las maestras, sino que lo supieron porque sus hijos regresaron atemorizados a sus casas.