El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, insistió este lunes al secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en que se mantendrá "firme" en las negociaciones de un cese el fuego con el grupo islamista Hamás para no ceder en las "necesidades de seguridad de Israel".
Netanyahu conversó durante unas tres horas con Blinken en Jerusalén, en una reunión que "fue positiva y se condujo con buen espíritu", según un comunicado de la oficina del primer ministro.
El mandatario israelí "reiteró el compromiso de Israel con la última propuesta (de acuerdo de cese el fuego) estadounidense sobre la liberación de los secuestrados, que tiene en cuenta las necesidades de seguridad de Israel, en las que él se mantiene firme", añadió el comunicado sin dar más detalles.
Blinken llegó el domingo a Israel para una novena visita desde que estalló la guerra el 7 de octubre, con el objetivo de impulsar un acuerdo de alto el fuego que incluya la liberación de los 111 rehenes israelíes que Hamás mantiene secuestrados en Gaza (de los cuales al menos 39 han muerto), así como la entrada masiva de ayuda humanitaria en la devastada Franja.
Netanyahu -al que muchos en su propio país acusan de torpedear las negociaciones con nuevas demandas y de anteponer sus intereses políticos- dejó claro el domingo que Israel está "negociando, no cediendo" ante Hamás.
El líder israelí instó a los países mediadores -Estados Unidos, Catar y Egipto- a presionar a Hamás y no a Israel, y reiteró su firmeza en dos puntos centrales: no cesar la ofensiva militar hasta desmantelar al grupo islamista y no retirar a sus tropas del estratégico Corredor de Filadelfia, que abarca toda la línea fronteriza entre Gaza y Egipto.
El equipo negociador de Israel se reunió durante el fin de semana con los mediadores en Doha, una cita a la que no acudió Hamás, demandando que, en vez de nuevas negociaciones, se aplicara lo que ya se había acordado en meses previos con base en una propuesta del presidente estadounidense, Joe Biden.
"La nueva propuesta" que surgió tras la reunión en Doha "responde a las condiciones impuestas por Netanyahu y es consistente con ellas", lamentó Hamás el domingo, al rechazar lo acordado en Catar.
El grupo islamista critica que la nueva propuesta no incluya un cese el fuego definitivo ni la retirada integral de las tropas israelíes de la Franja de Gaza, y que acceda a la "insistencia" de Netanyahu de que el Ejército israelí siga controlando el cruce de Netzarim (que conecta el norte con el sur de la Franja), el paso fronterizo de la ciudad gazatí de Rafah (con Egipto) y el Corredor de Filadelfia.
Hamás asegura haber aceptado el 2 de julio lo propuesto por el presidente Biden, mientras que Israel alega haber hecho lo mismo sin añadir nuevas demandas, sino "aclaraciones".
Mientras Washington estima que el acuerdo podría lograrse tan pronto como la próxima semana, Netanyahu habría dicho a sus ministros que "las posibilidades no son altas", según la radio pública Kan.
La guerra estalló el 7 de octubre del año pasado con un ataque de Hamás contra Israel que dejó unos 1.200 muertos y 251 secuestrados.
Desde entonces, las fuerzas israelíes atacan por aire, tierra y mar la Franja de Gaza, donde ya suman más de 40.000 muertos, 92.000 heridos, 10.000 desaparecidos bajo los escombros y 1,9 millones de desplazados que sobreviven una crisis humanitaria sin precedentes.