Este gran Diario de fecha viernes 19 de abril de 2024, en la página 8, publicó la nota informativa “Fichar” a estudiantes no previene la violencia”.
“La orden de identificar a alumnos en los centros escolares también violaría derechos establecidos en la Ley Crecer Juntos”.
“La orden de personal de fichar a los estudiantes, a quienes los maestros consideran que tienen una “actitud o conducta antisocial”, ha generado diversas opiniones, tanto de la población como de especialistas, que consideran que no es una medida de prevención, sino que tiende a criminalizar a los niños, niñas y adolescentes”.
Y eso que dice la nota es muy cierto, pues es una evidente falta de respeto hacia el alumno y una ofensa a los padres de familia, pues sólo se fichan a los delincuentes en potencia, a los malvados, a los esbirros, a los energúmenos, cuya dignidad está por debajo de los cánones morales.
Como maestro con más de medio siglo de ejercer la docencia, realmente me siento indignado por tal medida traída de los cabellos. ¡A quién se le ocurre fichar a un alumno. Sólo a una mentalidad perversa, trasnochada, desquiciada!
Y la nota periodística continúa: “Un director departamental de Educación en Usulután ha pedido a los responsables de los centros escolares que “fichen” a los alumnos con conductas antisociales. Juan Carlos Torres, director de la Maestría en Cultura de Paz, dice: “Recomiendo al Gobierno un programa diseñado desde la seguridad ciudadana, no la seguridad pública, desde la convivencia pacífica, para que puedan orientar, ayudar y acompañar a estos jóvenes que presentan conductas de riesgo”.
Vienen al caso, las atinadas recomendaciones del maestro y psicólogo educativo puertorriqueño, doctor Efraín Sánchez Hidalgo, en su “Decálogo del Maestro como higienista mental”, en su libro “Psicología Educativa”, y quien dice:
“1. Respetaré al alumno en todo momento.
2. Veré en cada alumno un organismo en desarrollo.
3, Jamás humillaré al alumno.
4. Haré de la escuela un clima de paz y de concordia.
5. Me esforzaré por atender al alumno en sus problemas personales.
6. Cada alumno es una personalidad diferente, y esto tengo que comprenderlo.
7. Cimentaré en el alumno principios éticos y morales.
8. Me esforzaré constantemente por mejorar las relaciones personales del alumno, consciente de que la calidad de éstas es el mejor índice de su salud mental.
9. Alentaré en el alumno la actividad.
10. En mi relación con el alumno mantendré una actitud serena y tranquila”.
Maestro, sicólogo, gramático.