La Comisión de Salvadoreños en el Exterior, legislación y gobierno dio aval a la iniciativa de ratificar el convenio sobre Circulación Vial de la ONU, que data de 1968, solicitada por el ministerio de Relaciones Exteriores.
El propósito de ser parte del convenio es facilitar la circulación internacional por vías públicas terrestres y de aumentar la seguridad en dichas vías, mediante la adopción de reglas uniformes de circulación.
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“Las Partes Contratantes en esta Convención adoptarán las medidas adecuadas para que las reglas de circulación en vior en su territorio se ajusten, en cuanto al fondo, a las disposiciones del capítulo II de este instrumento internacional”, señala la descripción oficial.
Según la solicitud de ratificación, entre los beneficios que se esperan tras su seguimiento se encuentran potenciar la facilitación del comercio y el transporte mediante la modernización y armonización de la legislación y normativa de tránsito vigente.
Así como, el desarrollo de políticas de seguridad vial encaminadas a la reducción del número de accidentes de tránsito y de las víctimas de dichos accidentes.
Otros de los beneficios enumerados se encuentran apoyar los proyectos que Ejecutivos que se encuentra promoviendo por medio del Viceministerio de Transporte, “los cuales pueden ser sujetos de financiamiento externo y cooperación internacional, con los cuales se permitirá desarrollar y mejorar las condiciones para la movilidad efectiva y una modernización en el sector transporte”.
“Promover la creación y reforma de la legislación aplicable en la materia, lo cual es congruente con el proceso de modernización de la legislación relativa al transporte, tránsito, movilidad seguridad vial que se está impulsando desde el Viceministerio de Transporte”, justificó el gobierno salvadoreño.
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Para explicar la solicitud asistieron a la Comisión la directora de Asuntos Jurídicos, Patricia Aguilera, y el director de Negociación y Tratados, Diego Góchez; ambos del ministerio de Relaciones Exteriores.
Aguilera señaló que si bien es un tratado antiguo, fue hasta hace poco que los Estados miembros le comenzaron a dar la importancia suficiente.
Aguilera y Góchez señalaron que era importante su ratificación para tener regulaciones uniformes que podrían venir a aplicarse en rubros como el comercio y el turismo local.
“Puede venir un camión con comercio de Estados Unidos, Argentina, de Panamá, entonces lo que se busca es que toda la señalización relacionada con la circulación vial sea acorde y estandarizada para que no tengan afectaciones en cuanto al traslado del comercio y que hasta en cuanto a las licencias de conducir tengan características específicas”, especificó Aguilera.
“Estos signos de educación vial sabemos que son universales y esto está contemplado en la convención, ahí se tipifica cómo se van a utilizar los colores, las formas porque lo visual es lo que va a ayudar a un turista, por ejemplo que no sepa español, pero que sí distingue las señales a que pueda identificarles”, recordó el diputado Raúl Chamagua de Nuevas Ideas.
Chamagua y sus colegas oficialistas, si bien avalaron la medida, obviaron reconocer que el gobierno de su partido ha cambiado algunos conos color anaranjados por el color celeste partidario, contrario a estos estándares internacionales que se comprometen a cumplir.
Con el aval, y próximamente su aprobación oficial, el Estado salvadoreño continuará conformando los 125 Estados miembros.