Como miembro del concejo municipal capitalino, Héctor Silva Hernández, del partido Nuestro Tiempo, expresó a El Diario de Hoy su preocupación ante esta creciente y millonaria deuda por el impago del Mercado Cuscatlán de parte de la municipalidad, y trajo a cuenta el origen de la situación: “desde que se firmó en 2015, con valores totalmente alejados de la realidad, el contrato estaba destinado al fracaso”.
El concejal recordó que la actual administración de Mario Durán (2021-2024, por Nuevas Ideas) recibió esta deuda en $3.9 millones en mayo de 2021; “para mediados de 2022 rondaba los $4.9 millones. El 5 de febrero de 2024, recibimos otra carta de Desarrollo Universal, que hacen ver que la deuda ha crecido. Recibimos una nueva carta el 12 de febrero, ya con un tono un poco más agresivo de parte de la empresa, que plantea que este pago ha sido determinante en las finanzas de la empresa, incluso dicen que están a punto de irse a quiebra”.
La deuda, a la fecha, supera los $6.2 millones
Según Silva Hernández, tanto él como otros concejales, incluso de Nuevas Ideas, han pedido en sesiones de la alcaldía “que la dirección de Finanzas y la Gerencia Legal puedan emitir una opinión al respecto”, pero las sesiones pasan, el tiempo sigue su curso y la aumenta crece y crece.
“No hemos recibido ningún tipo de información sobre cómo en la municipalidad se plantea para abordar esta situación”, explicó el concejal de Nuestro Tiempo, quien agregó que el 23 de febrero hubo otra sesión de concejo en donde insistió en el punto, pero nuevamente no hubo respuesta.
El panorama es muy negativo para las finanzas de la principal alcaldía del país, que desde 1 de mayo próximo pasará a ser el distrito corazón del megamunicipio San Salvador Centro, junto a Ayutuxtepeque, Mejicanos, Ciudad Delgado y Cuscatancingo, a cuya población se le “heredará” esta deuda de 6.2 millones por el impago de arrendamiento del Mercado Cuscatlán.
“Las administraciones vienen y van, también los alcaldes y los partidos políticos, pero esta es una deuda que se está acumulando. Independientemente de quién sea el alcalde en 10 años, de la persona o el partido político, esta deuda se está acumulando a la institución, y por tanto a los y las capitalinos, y ahora a habitantes de otros municipios”, remarcó Silva Hernández.
Como lo comprobó El Diario de Hoy en visita reciente, el Mercado Cuscatlán es un espacio semivacío, con escasos puestos ocupados y todavía más escasa presencia de clientes.
“No solo está funcionando el Mercado Cuscatlán muy por debajo de su capacidad, sino que algunos de los locales que ahí funcionan, pagan con especies, porque simplemente no hay suficientes personas interesadas en tener un local en ese mercado, y mucho menos en pagarlo con dinero, con dólares, sino que la administración está haciendo malabares para que tenga algún tipo de ubicación (de ventas), que no se vea el ridículo de un mercado totalmente vacío”, ilustró el funcionario, quien cerrará su participación municipal cuando haya cambio de administración el 1 de mayo próximo, como concejal saliente.
Como propuesta de solución, Silva Hernández consideró que “lo que tendríamos que estar haciendo, con la robustez de un equipo legal como lo tiene una Alcaldía de San Salvador, es sentarnos con los propietarios (del inmueble alquilado), y ver cómo podemos hacer todo lo que está a nuestro alcance para cambiar los términos de ese contrato. Los pagos mensuales actuales son insostenibles”.