El Barcelona cierra este miércoles (2:00 p.m.) ante el Amberes la fase de grupos de la Liga de Campeones con un doble aliciente: asegurarse matemáticamente el primer puesto del grupo H y sumar una victoria en Bélgica que le permita embolsarse un botín de 2,8 millones de euros (3.02 millones de dólares), tal y como ya se lo aseguró el Real Madrid.
Dos premisas que no parecen complicadas, a pesar de la irregular andadura del equipo de Xavi Hernández refrendada en la última derrota liguera contra el Girona (2-4).
No solo porque enfrente tendrá a la 'cenicienta' del grupo, que llega sin opciones de clasificación para la Liga Europa después de contar por derrotas todos sus partidos, sino por la carambola que tiene que darse para que el Shakhtar Donetsk le arrebate la primera posición.
Con un punto tiene suficiente el Barça para ser cabeza de serie en el sorteo de los octavos de final que se celebrará el próximo 18 de diciembre en Nyon.
Pero incluso perdiendo en el Bosuilstadion podría acabar como líder. El equipo catalán tiene el 'goal average' particular ganado con el Oporto y empatado con el Shakhtar, por lo que el único equipo que puede discutirle el liderato es el cuadro ucraniano.
Para ello, el equipo de Marino Pusic debería ganar en Portugal y recortar la diferencia de siete goles en el 'goal average' general que le separa del conjunto entrenado por Xavi.
Matemáticas al margen, el Barça no solo quiere ganar para ahorrarse otro sinsabor europeo ante un rival muy inferior al que ya ganó por 5-0 en Montjuïc, sino también para ingresar un premio de 2,8 millones de euros. Un detalle que no es menor en un momento de estrecheces económicas.
Para ello, Xavi ha convocado a todos los futbolistas disponibles del primer equipo. También a Ilkay Gündogan, Robert Lewandowski y Ronald Araujo que, pese a que en un primer momento quedaron fuera de la lista, volaron finalmente a Bélgica ante el cambio del plan de viaje del equipo, que no regresará a Barcelona hasta el jueves.