Así lo dijo San Juan Pablo II, que fue canonizado el 27 de abril de 2014.
El psiquiatra español Emilio Mira y López, en su libro “Cuatro gigantes del alma” (1948): el amor, el miedo, el odio y el valor, dice que el miedo es uno de los más poderosos, que puede paralizar al miedoso, a tal grado que hasta puede perder momentáneamente el habla.
Miedo es lo mismo que aprensión, cuidado, recelo, temor, pánico, jindama, caquelo, julupe, medrana, timidez, cobardía, pusilanimidad, alarma, turbación, horror, amenaza, espanto, estremecimiento, sobrecogimiento, susto, acoquinamiento (“Diccionario de sinónimos y antónimos”, de la Editorial OCÉANO. México, D. F., julio de 1996).
El doctor Mira y López fue un psicólogo español-cubano l nacido en 1896, que se radicó en Brasil. Escribió 9 libros, entre ellos, de Psicología, Psicotecnia y Psiquiatría, materias de las cuales desarrolló una aplicada y extensiva labor docente de investigación científica.
El doctor Mira y López demostró que “el miedo no es una emoción al servicio del instinto de conservación, como sostenía la Psicología hace tiempo, sino que ‘representa siempre una emoción perjudicial que evidencia el fracaso de la reacción personal. Acompañada por el proceso de inhibición paradojal, producido por la acción de influjos que desintegran o interceptan las formas habituales de respuestas’ ”.
Y continúa: “El miedo tiene también sus signos fisiológicos: a) la pérdida de fluidez motriz; b) la exaltación de los reflejos neurovegetativos;
c) la inhibición progresiva de las reacciones vitales adaptativas”.
Pues bien, volviendo a San Juan Pablo II debemos recordar que no tengamos miedo de hablar cuando la palabra es justiciera, que hablemos abiertamente ante la verdad de las cosas. “Tocad la puerta y se os abrirá”, “Hablad y se seréis oídos”, “Pedid y se os dará”.
El nombre de San Juan Pablo II era Karol Jósef Wojtyla. Nació en Wadowice el 18 de mayo de 1920 y falleció el 2 de abril de 2005. Papa polaco, sucesor de Juan Pablo I. A través de numerosos viajes y publicaciones reforzó el papel de la Iglesia. Escribió el “Catecismo de la Iglesia Católica” y la encíclica “Veritatis splendor”, en 1993.
Fue Papa desde 1978, Arzobispo de Cracovia en 1964. Fue el primer papa no italiano desde Adriano VI. Promulgó el primer Código de Derecho Canónico el año 1983 y el nuevo Catecismo en 1982. Ha publicado importantes encíclicas, como “Centesimus Annus”, en 1991.
Respecto al miedo, el pintor, escultor, arquitecto, ingeniero e inventor italiano Leonardo da Vinci (1842-1918) dijo así: “Así como la animosidad entraña peligro para la vida, el miedo es causa de seguridad para ella”.
¡Miedo, aléjate de nosotros, no nos perturbes, no nos quites la paciencia, déjanos tranquilos, apártate de nuestro lado, vete al infierno, ahógate en el océano! ¡Miedo, déjanos en paz!
Pidámosle, entonces, de todo corazón, a San Juan Pablo II, que nos quite el miedo, que nos volvamos valientes. Y de seguro que él escuchará nuestra petición. ¡Sí, señor!
Maestro, sicólogo, gramático.