Hay más de treinta puestos que son usados como bodegas para guardar la mercadería entre los dos niveles del edificio municipal del mercado de La Unión, según manifestaron vendedores en el lugar.
El edificio fue inaugurado en el 2005 y ya en el 2006 empezaron a ser ocupados por los comerciantes. En la mayoría de los casos, los vendedores hicieron modificaciones y ampliaciones a los locales asignados.
Pero, actualmente, los comerciantes que están dentro del mercado se quejan de que es poco lo que venden porque la población decide comprar en los negocios de las calles.
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“Así pasamos todos los días, con poco movimiento de usuarios porque afuera compran, y esa gente que está en las calles muchos de ellos tienen los locales solo para guardar la mercadería. Eso no es justo para todos los que estamos adentro del edificio”, dijo Eduviges Reyes, vendedora en el mercado municipal.
Wilfredo Fuentes, administrador del mercado, manifestó que están trabajando en un censo para contar con los datos de la cantidad de puestos que son usados como bodegas, e identificar a las personas que se les dio en arrendamiento pues consideran que en la primera planta el 70 % de los puestos está funcionando y son pocos los que los tienen como bodega.
Según el administrador, lo que manifiestan los locatarios es que adentro no se vende, solo lo utilizan para bodegas.
“Ellos tienen su venta al lado o afuera y solo vienen a guardar adentro”, describió.
Óscar Parada, alcalde de La Unión, manifestó que el mercado es una deuda histórica importante por el desorden que hay. Las avenidas están con construcciones de locales de bloque y cerámica que hicieron desde el 2004, los vendedores empezaron a usar las calles y avenidas y eso ocurrió después de que se quemó el antiguo mercado.
“Se está trabajando en un censo de cada puesto, se identificará quiénes están afuera vendiendo pero que tienen asignados un local dentro del edificio, para que retornen y los usen; todos esos puestos siguen siendo de la municipalidad, las personas solo son administradoras mientras tienen en vigencia su permiso”, agregó el edil.
Roberto Flores tiene 10 años de tener el local de reparaciones de reloj en el segundo nivel del mercado y dice que cada año van empeorando las condiciones del edificio. Afirma que, de todos los alcaldes que han estado después de que construyeron el mercado, ninguno ha logrado que todos los puestos sean usados para lo que fueron asignados.
“Aquí en la segunda planta hay unos puestos que hasta de servicio sanitario lo usan algunas personas, aquí siempre verán locales cerrados porque los tienen de bodega, otros están sucios”, agregó Flores.
“Varios alcaldes han prometido lograr que todas las vendedoras de las calles pasen a ocupar los puestos que tienen como bodegas, pero ninguno lo ha logrado, es una lástima que la mayoría de las calles están ocupadas por las ventas cuando hay un mercado que no está ocupado en su totalidad”, señaló Juan Alfredo Velásquez, ciudadano.
El sistema de cobros de la municipalidad tiene registrado un total de 987 puestos, entre los que están en el edificio municipal y en las calles y avenidas aledañas.