El régimen de Daniel Ortega condenó este viernes a Monseñor Ralando Álvarez a 26 años de prisión, un día después de que puso en libertad a 222 presos políticos quienes fueron enviados a Estados Unidos.
Monseñor Alvarez, quien guardaba arresto domiciliar se negó a salir de Nicaragua y el mismo jueves fue trasladado de a la prisión de El Chipote.
Para el 15 de febrero estaba previsto que el religioso enfrentara juicio, no obstante fue adelantado para este viernes. A demás de la condena a 26 años se le impuso una multa de 58,000 córdobas ($1,594.50), pérdida de nacionalidad e incautación de bienes.
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La sentencia la dio a conocer Octavio Rotschuht, magistrado presidente de la sala penal 1 del Tribunal de Apelación de Managua. El funcionario dijo que Álvarez fue condenado por los supuestos delitos de traición a la patria, obstrucción de funciones, agravada desobediencia en perjuicio de la sociedad nicaragüense y difusión de noticias falsas
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Inicialmente, el juicio contra el religioso estaba para el 28 de marzo, luego en vista de su negativa de salir de país el fue adelantado para el 15 de febrero, no obstante el régimen terminó celebrando los oficios en las últimas horas.
“Que sean libres, yo pago la condena de ellos”, dijo el obispo Álvarez el jueves luego que 222 presos políticos fueron excarcelados y enviados en un avión privado hacia Estados Unidos, y quienes también han sido despojados de su nacioalidad.
La Organización de los Estados Americanos (OEA) y otros organismos internacionales ha exigido al Gobierno de Ortega que restituya los derechos de los 222 desterrados.